"Luego del juicio oral en el que se desahogaron las pruebas de las partes, la corte de enjuiciamiento del Distrito Central de la Ciudad Especial de Seúl sentencia a cadena perpetua al ciudadano por los delitos de: asesinato por mandato, asesinato po...
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Se miró al espejo que estaba detrás de la puerta de la habitación de Jimin, la ropa de Taehyung le quedaba muy bien. Había optado por llevar unos jeans y una playera negra que decía "London boy" en la parte de enfrente. Se sorprendió abrazándose a sí mismo para percibir mejor el aroma de Taehyung a través de su ropa.
Tenía que admitir que Taehyung le gustaba mucho. Sabía que no tenía ninguna oportunidad con él, pero no podía evitar sentirse atraído. Una vez en la universidad escuchó que a las chicas siempre les llama la atención los chicos malos, en su caso, también podía aplicar eso. Pero en su defensa tenía que decir qué: ¡Quién demonios no se fijaría en alguien como Taehyung! Era extremadamente atractivo, parecía un Dios griego, además era sumamente inteligente, un buen estratega y hasta su mal humor lograba seducirlo.
— ¿Se puede hacer para qué quieres cambiarte de ropa? —preguntó Jimin desde el marco de la puerta.
— Vamos a ir a ayudar a Taehyung — respondió como si nada.
— ¿Vamos a qué? — preguntó incrédulo el otro — ¡De ninguna manera Jungkook! — gritó — Taehyung es capaz de matarnos si nos descubre.
— A ti no te hará nada, eres de la familia — replicó Jungkook — no tienes nada que perder.
— Te equivocas. No conoces a Taehyung cuando se enoja — advirtió Jimin.
— Hace unas horas estuvo a punto de darme una paliza.
— Eso no es nada Jungkook comparado a lo que te puede llegar a hacer — le dijo con seriedad — en una ocasión su primo Félix lo desobedeció y no te imaginas la tortura que lo hizo pasar.
— Pero no lo mató ¿Verdad?
— No, pero no quiero que Taehyung me torture — dijo Jimin — a Félix lo encerró durante tres días en un sótano sin comer absolutamente nada, le pegaba a diario con un fierro caliente en todo el cuerpo lo que provocó que perdiera la vista en uno de sus ojos y para rematar le cortó los dos dedos meñiques de las manos — Jungkook se detuvo a observarlo para saber si estaba bromeando, pero se dio cuenta de que no lo hacía al ver su semblante en el rostro.
— ¿Qué fue lo que hizo su primo para que Taehyung lo castigara de esa manera?
— Desobedecerlo — respondió Jimin — y Félix es parte de su familia, quizás no me mate, pero no quiero ser una de sus víctimas.
Jungkook recordó que le había dicho a Taehyung, que no quería ser su víctima número catorce, pero tampoco podía dejarlo ir solo. Sabía que era un asesino a sueldo con experiencia y todo eso, pero algo le decía que debía ir con él y ayudarlo con el rescate de su padre.
— Bueno es un riesgo que yo si pienso correr — le dijo con seriedad — no pienso dejar solo a Taehyung, además se trata de mi padre — Jimin lo observó negando con la cabeza.
