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Invisible.

<<Que no puede percibirse con la vista.>>

Así me siento, invisible.

Te preguntarás por qué, bueno, la respuesta es fácil y sencilla. Pongamos el ejemplo de que se están celebrando fiestas a las que tu quieres ir con toda tu vida y de repente te das cuenta. Ves las horas en el reloj pasar lento y cada vez van más despacio. Cuando te quieres dar cuenta, son las 05.00 p.m. y no tienes ni un solo mensaje, tal vez de algún grupo pero ninguno contiene la simple pregunta de "¿Quieres salir de fiesta?".

Y siguen pasando las horas, cada minuto que pasas te paras a pensar en qué estará haciendo la gente o lo que se llaman tus "amigos", y te preguntas una y otra vez por qué no te han escrito.

06.00 p.m. y la fiesta ya debería estar pasando de largo de tu vista, pero aún no has ido. Se te ocurre preguntarles qué tal, si quisieran salir a divertirse contigo pero no lo haces, prefieres esperar a confirmar que eres alguien para ellos y que te pregunten si vas con tus "amigos".

08.00 p.m. han pasado tres horas desde que la fiesta habría empezado y piensas que podría haberse cancelado por lluvia pero compruebas que el suelo de las calles no tiene agua. Y nada.

09.30 p.m se acabó. Ya no va a pasar nada, sigo siendo un fantasma. El daño que me hace por dentro me mata, pero por fuera no puedo soltar siquiera una triste lágrima porque ya no puedo expresar lo que siento.

Y el vacío de nuevo recorre mi cuerpo.

A flor de pielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora