(Shinigami)
Apresurada corrió a través de las escaleras hasta el departamento de Orihime donde las ventanas agrietadas y vidrio en el suelo eran protagonistas en el cuarto, las chicas respiraban e instintivamente se arrodilló en frente de Inoe, yacía inconsciente únicamente con raspones en las mejillas, soltó un respiro de alivio tratando de asimilar lo que había pasado.
Eso era un monstruo parecido al de la tarde, además ese era el mismo hombre pero parecía alguien peligroso aunque pensándolo bien la salvó, pero tenía miedo.
— Tardaste mucho —, a sus espaldas escuchó la voz masculina que la sobresalto. El hombre tenía los brazos cruzados, su misma expresión que la analizó con la mirada —, así que también puedes oírme, que fastidio — dijo entonces recibiendo un florero sobre su cara que se rompió.
Los gritos de Rukia no tardaron en ser presentes mientras arrojaba todo lo que pudiera romperse en la cara del hombre, a diferencia de la primera vez él haciendo gala de reflejos increíbles esquivo apresurado cada uno de los adornos.
— ¡Oye! ¡Oye! — gritó desesperado por no recibir otro de esos porque en su frente tenía un corte por la cerámica del jarrón, además la casa parecía tener tantos adornos que era perturbador, no cabía duda que usaría cualquier cosa dolorosa como arma — ¡Espera!
— ¡Ayuda! ¡Ayuda! ¡Un maníaco está aquí! —, gritó desesperada.
— ¡Acabo de salvarte! ¡No quiero matarte! —, gritó pero en ese momento de descuido recibió un florero más grande que el primero en su cara cortando su mejilla izquierda, en un movimiento rápido saltó para tomarla en sus manos con firmeza, tenía otro jarrón y se preguntó ¿De dónde saca tantos?
— ¡Suelta! —, gritó asustada pero al parecer era un combustible para hacerla ver más fiera —. ¡SUÉLTAME! — Exigió con más firmeza —, ¿Cómo entraste? Si sólo viniste por esa cosa ¿Porqué me sigues? Te he visto dos veces, no eres humano se te nota a leguas. ¿Qué eres?
El masculino sorprendido abrió la boca ampliamente, sus cabellos anaranjados brillaban más bajo la luz artificial.
— ¿Dos veces? — intentando hacer memoria no recordó en absoluto nada — ¿Estas loca? Nunca te he visto — o tal vez era su afición por nunca acordar nombres o caras de personas. Cuando la vio hacer fuerza para soltarse presionó con más firmeza haciendo soltar un gemido de dolor a Rukia, los morados en las muñecas por la fuerza de sus dedos ahora existían —, en todo caso solo vine a borrar tu memoria —; soltó un respiro espeso.
— ¡Me haces daño! —, gritó rompiendo finalmente el jarrón en la cara a él hombre causando otro corte y que la soltara, esto fue combinado con una patada que lo derribó al suelo.
Lo tomó del kimono alzando lo hasta arrinconar a la pared, a él nunca le había ganado una mujer — aunque tampoco ganaba con ellas— los hombres no le ganaban, menos una mujer, sin embargo aunque él evitó lastimarla, una humana le derribó de una patada, incluso su nariz sangra.
— Te he preguntado que eres —, dijo furiosa — ¡Nada de mentiras! No me tomes el pelo maldita alma o lo que seas, porqué al parecer puedo hacerte sangrar y lo seguiré haciendo sino me dices la verdad.
Más sorprendido que molesto o asustado escupió al suelo antes de responder, soltó un suspiro de fastidio.
— Estoy cansado de esta mierda — se quejó —, odio esta misión. — susurró por lo bajo — ¡YA SUÉLTAME MALDITA! — agobiado la empujó bruscamente pero no la dejó en el suelo como lo tenía previsto, en su lugar únicamente tambaleó sobre su propio eje retrocediendo dedicando una mirada asesina.
— Bien, la verdad es que soy un shinigami —. No supo de dónde salió o lo encontró pero le había lanzado otro de esos jarrones a la cara.
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AHCELB
Fanfiction¿Como fuese la historia si todo fuese sido al revés?... Rukia Kuchiki era una chica visiblemente normal, a excepcion de su inusual habilidad de ver espíritus. Ichigo Kurosaki un teniente del gotei 13 es enviado al mundo humano para esterminar...