2. Incendio

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Albedo se tuvo que quedar ingresado unos días, por lo que Kaeya iba a visitarle todos y cada uno de estos, no quería que se sintiera solo, pero se alivió al saber que tiene un compañero de habitación.

Era un chico con mechas verdes y pelo oscuro, este se había partido la rótula al ir montando en skate, era universitario.

Cuando fue a visitar a Albedo, pudo conocer al compañero de habitación el cual Albedo le había dicho por llamada. Kaeya intercambió unas cuantas palabras con este, al parecer se llamaba Xiao y era bastante cortante, pero si Albedo no se sentía solo, con eso le bastaba.

-¿Cómo te encuentras hoy, amor?-Le pregunta Kaeya al rubio-

-Bastante bien, aunque me molesta el ojo vendado, pero bueno.-suspira algo decaído-

-No te pongas triste, vas a seguir viendo mi hermosura.-entonces Albedo suelta una pequeña carcajada, el chico si que sabía como levantarle los ánimos-

-Eso no lo dudes, incluso si me quedara ciego por completo, la seguiría viendo.-Kaeya muestra una sonrisa enternecedora para después darle un beso en la frente al contrario-

-Lamento tener que sacar el tema, pero a parte de ser tu novio soy inspector, ¿podrías contarme qué pasó? Si no te sientes preparado o cualquier cosa, no te presiones, tenemos otros días.-

-Uhm...-se queda unos momentos callado para pensar- Iba a ir a casa para prepararme para nuestra cita... y de repente noté como alguien se me acercó por detrás y quiso ponerme un pañuelo blanco en la boca.

Mientras Albedo relataba los sucesos, Kaeya los iba anotando todo a detalle, pero por otra parte se sentía culpable y se sentía vulnerable, con miedo de perder a quien más ama.

-Pero me defendí, y eso hizo que sacara un arma o algo, no lo vi, y esta persona contraatacó dándome en el ojo y en otras partes, como en el abdomen, y de ahí salió corriendo.-agarra las sábanas con algo de fuerza para poder arroparse más- Su voz era masculina, y tenía un tono suave.

-Gracias por hacer el esfuerzo amor, se que no es nada fácil.-le mira y le abraza con cuidado, pues no quería lastimar sus heridas-

-Lamento si interrumpo, vengo a visitar a Xiao.-dice un rubio desde la puerta de la sala-

-No molestas, al contrario.

-Me alegra oír eso.-dice mientras se acerca a la cama en donde se encontraba Xiao-

-Xiao, te traje Tofu de Almendras, se que la comida del hospital está asquerosa.

-No tenías por qué, te quiero Aether.

-Anda, comeeee, que seguro ni desayunaste porque no te gusta el yogurt que dan aquí.

-¿Cómo lo-?

-¿Tendré que venir también para darte el desayuno?

-Si quieres... no me quejo.-tose fingiendo interés-

Y ambas parejas se quedaron hablando con sus novios un rato, el primero en irse fue Aether pues tenía cosas de la universidad que hacer, y más tarde se fue Kaeya, quien ahora se dirigía a la comisaría de los Favonius.

Albedo aunque no lo expresara, tenía miedo, tenía miedo de ser asesinado o secuestrado por cualquier loco, ¿y si se cuela en su habitación y le inyecta cualquier cosa como en las películas?

De mientras, Kaeya se encontraba en la comisaría de los Favonius, Jean nada más verle fue a reprocharle, le había dado días libres.

-¿Qué haces aquí?-dicd mientras frunce el ceño-

-Apropiarme del caso, no voy a descansar hasta que-Jean le corta-

-Entiendo que quieras justicia, pero en estos momentos es importante que alguien le haga compañía, no sabemos que puede estar tramando el asesino, y digo asesino porque hemos encontrado pruebas que lo relacionan con la muerte de Sucrose, de Timateus y de Eula.

-¿O sea podría estar yendo a por Albedo en este mismo instante?

-Es solo una suposición, o al menos se encuentra cerca de ahí.

-Tiene compañero de habitación, no puede hacerle nada.

-A no ser que... se haga pasar por un doctor.

-Es fácil si tienes el carnet de estudiante, una bata y las cosas que llevan.

-Por los Siete, me voy corriendo, cualquier otra noticia me vas comentando, gracias.

-Te iré avisando, adiós.

Kaeya se fue corriendo al hospital con el temor en su cuerpo, se estaba empezando a imaginar situaciones descabelladas y eso no era bueno.

Cuando llegó, entró a la sala y vio a Albedo durmiendo plácidamente, y un suspiro de alivio salió de la boca del peli azul, mientras su respiración era irregular por haber venido corriendo.

-Bueno, yo ya me voy, en el análisis está todo el orden.-dice un Doctor que estaba al lado de Xiao, pero dando la espalda a Kaeya-

La voz se le hacía familiar, pero en ningún momenti se paró a verle, pues para él es más importante Albedo. Pero a veces los detalles son importantes, quizás si se hubiera fijado con detenimiento, algo le habría olido bastante mal, y quizá fuera el verdadero asesino.

Pero la vida no da segundas oportunidades.

Pasaron unas cuantas horas desde que se fue el doctor.

"Beep Beep"

El teléfono de Kaeya empezó a vibrar, por una parte recibiendo un mensaje de Jean que decía que Klee iría a visitar a Albedo, y por otro lado un número desconocido, el cual le traía malas vibras.

Abrió el chat, no sin antes activar lo de que no se marcan si lees los mensajes, y lo leyó.

El miedo empezó a apoderarse de él u fue subiendo por toda su espina dorsal basta llegarle a la cabeza.

Era una foto del apartamento de Albedo.

En la foto no salía nada espeluznante ni raro, era su apartamento exáctamente igual y ordenado de la misma manera, pero era un número desconocido, y con todos estos sucesos pasados, era fácil relacionarlo.

¿Pero cómo había obtenido su número de teléfono?

Se lo tenía que informar a Jean en cuanto antes, se supone que vendrá con Klee en unos minutos, por lo que podrá comentárselo.

...

-Eres una basura, ¿por qué tuviste que nacer?-le decía una madre a su hijo, mientras su padre le pegaba-

Este niño tan solo podía llorar y llorar, y sus gritos de auxilio no eran escuchados por nadie, pues cuando sus padres le hacían ese tipo de cosas, le encerraban en el sótano de la casa.

Pero los padres nunca pensaron que su hijo sería capaz de incendiar la casa con ellos dentro, lastimosamente solo hubo un superviviente, y esto no le agradaba al niño, pues era la persona que había provocado sus abusos y maltratos de niño.

En un futuro se vengaría.

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✧ Aunque la muerte nos separe ✧ (Kaebedo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora