Capítulo 7: Otro cuarteto, a término.

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Ha llegado junio, mi cumpleaños está muy cerca, al utilizar el cuaderno para eliminar al grupo "Luneth", alteré la línea accidentalmente, otra vez, me tocó trabajar en una ferretería cercana donde vivo. Me despierto por la mañana, bajo a la cocina, no veo a mi mamá por ningún, hasta que vi en la sala sobre la mesa de centro un portarretrato, con una foto de mi mamá. Viéndola bien, resulta que mi mamá tuvo que irse a un viaje de negocios por dos años, con una tía de él que estaba en república dominicana, justamente mi tía también estaba en la foto, al verla me llegan los recuerdos de sin la ausencia de mi mamá, luego, leyendo los mensajes que tengo con mi mamá y mi tía, me dicen que tal vez estén en casa finalizando el viaje, justo para mi cumpleaños. Fui a clases, esa misma mañana, a penas poner un pie en la universidad, me di cuenta que hasta cambió su aspecto, era como si hubieran unido dos edificios en uno, caminando por los pasillos de esa nueva institución, la cual era como un semicírculo, de tres pisos, incluso con un patio central, y una plaza, algo me decía que de verdad este no era mi escuela, y justo al lado de ella, se encontraba, la siguiente parte del edificio, que era un cuadrado de dos pisos y medio, mientras el primero estaba pintado de amarillo ocre, el otro estaba pintado de azul celeste por dentro, por fuera seguía pintado de ocre, y finalmente me encuentro con una sorpresa, pasando por una seccional, escucho un "¡Kyouto!", volteo a ver de dónde viene, y me doy cuenta de que era mi Tía, su nombre es Myra.

Contento, le digo: ¡Tía! - Rápidamente camino hasta ella, le doy un fuerte abrazo, hace casi seis años que ni la veía, gracias a que migró hasta allá a vivir feliz unos años.

Mi tía me dice: Hijo, que bueno verte finalmente en la universidad ya, bueno, te tengo una pequeña sorpresa, toca el locker, y la puerta se abrió, y mi mamá salió de allí diciendo: "¡Sorpresa!"

Y yo contentísimo, estuve allí un rato con ellas, un poco más tarde, me fui de ahí, y caminé al siguiente bloque. Era un edificio con forma cuadrada, y entré a clases. Una vez entrando al salón, me senté, en eso se me ocurrió ver a una pareja, que estaba besuqueándose, el chico, que se llamaba Wincher, se notó de qué estaba muy entretenido viéndolos, dejó a su chica, y empezó a caminar hasta mí, furioso, y me dijo: Muy divertido vernos, ¿eh amigo?

Le respondo, cabizbajo y sin hacer contacto visual: Wincher, no quiero problemas. – me toma de la camisa. – No volveré a mirar hacia allá, te lo prometo.

Automáticamente me suelta, y me pide disculpas por ello, se lo acepto. De repente, llega una terrible noticia, llega una llamada al teléfono de Kyouto, respondo: ¿Aló, hola?

Llamada: ¡Kyouto ven pronto! ¡La ferretería se quema! ¡Está todo en llamas, Kouichi-san está en peligro!

Apenas me lo dijeron, tomo mi mochila, y salgo corriendo de allí, gritando: ¡KOUICHI-SAN!

La ferretería estaba como a dos kilómetros de la universidad, me fui corriendo, lo más veloz que pude, apenas llegué, le pregunté a la gente cercana: ¿Sigue alguien adentro?

Me respondieron: ¡No lo sé hijo! Tal vez el sitio está solo desde hace un buen rato.

Y escucho un grito desde dentro, giro a ver, y a Kouichi desde la ventana gritando, pidiendo auxilio, y se me ocurrió llamar a los bomberos, por suerte ya ellos venían en camino, pero no podía quedarme ahí parado, utilicé mi cuaderno, para alterar nuevamente el flujo, y logré hacer que los bomberos llegasen, y apagaran todo. Pero algo no andaba bien, ese incendio no pudo crearse solo.

Algo me dice, que debo investigar, tal vez los portadores de diario "Solem" son los responsables de todo este asunto. Estuve en clases, nuevamente fui a allá, como transcurrió nada más que pocos días, justo después de haber sacado del camino a los de diario "Luneth", tengo todavía las fotos de los horarios, el de Shina, Daisuke, en fin, tal vez, me ayude a descubrirlos poco a poco.

Las Caras Del Destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora