𝟎𝟏

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Mayo de 2024

—Hola—saludó el hombre de edad avanzada-Me llamo Andrei. Usted debe de ser la reportera Jennie Kim-su mirada descendió hasta la tarjeta de identificación que colgaba en mi cuello y luego volvió a mis ojos.

Andrei tenía el cabello en tonos negros y grises, su rostro estaba llenó de arrugas y la vestimenta que traía puesta era muy formal para ir a recoger a alguien de un hotel.

-Un placer-le dije, estrechándole la mano.

Al meternos al coche Andrei permaneció con las manos apretando el volante y la mirada fija en los limpia parabrisas. Parecía haberse desconectado de la realidad, como si su cuerpo hubiera quedado junto a mi mientras su alma daba un paseo por los alrededores. Luego, se volvió a verme y me mostró una sonrisa tímida.

Genial, mi chófer y guía era un hombre que quizás deliraba y moriría muy pronto.

—¿Se encuentra bien?—le pregunté preocupada.

—Perfectamente—asintió mientras encendía el coche—Me pasa a veces, no es nada grave.

—¿Seguro?

—Muy seguro—volvió a asentir—¿Puedo hacerle una pregunta?

—Claro.

—¿Qué edad tiene?, es una pena que atente contra su vida siendo tan joven.

Lo miré de reojo. Entonces este hombre era un creyente de esa absurda historia de terror.

—Tengo veintisiete y si muero en este viaje entonces moriré sabiendo la verdad.

Quise agregarle humor a mis palabras pero Andrei me miró con una expresión deductiva. No era posible que creyera que en realidad iba a morir...¿o si?

—Ve eso de ahí—señaló un cartel con el nombre de la ciudad a un costado de la carretera—Ese cartel tiene veintinueve años, es mayor que usted-emitió una risa ronca y reí con él después.

—¿Ha vivido aquí toda su vida?

—Toda mi vida-asintió—Conozco está ciudad como a la palma de mi mano.

Bendije mi buena suerte. Andrei podría proporcionarme información necesaria sobre mi investigación—mucha más de la que ya pretendía que me diera—Saqué de mi mochila la grabadora—que siembre llevaba conmigo—y la encendí.

Le preguntaría solo lo necesario, no estaba segura de cuánto tiempo nos tomaría llegar al castillo del general Viktor, ya habría tiempo para enfatizar en otras áreas.

—¿Cuándo fue la primera vez que escuchó sobre la historia?

—Siempre la he sabido. Probablemente era lo que mi madre me decía cuando aún estaba en su barriga.

—¿Qué le decía?

—Que no debía de subir a la colina, de lo contrario tendría una muerte segura y horrible.

Curioso, era justo lo que estábamos haciendo.

—¿Por qué?

—Porque Lisa me mataría y bebería la sangre de mi cuerpo.

—¿No le parece que es una historia para controlar a los niños?—fijé la vista en la colina—Yo era muy curiosa cuando niña y creo que usted también lo fue. Hubiera subido hasta ahí sin pensarlo dos veces. Tal vez su madre y las otras personas la inventaron para evitar eso.

—¿Historia para asustar a los niños?—negó—Todo el mundo la contaba con miedo en sus ojos: mujeres, hombres, niños y ancianos. No creo que fuera solo para asustar a los niños, es absurdo.

𝐐𝐔𝐄𝐄𝐍 𝐎𝐅 𝐌𝐄𝐀𝐍 ❬ 𝐉𝐄𝐍𝐋𝐈𝐒𝐀 ❭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora