BRUTAL (Thramsay)

Religión: Parte I

Conforme fue creciendo, se enteró de cosas que no habría podido imaginar en un inicio, como la verdadera complejidad que cargaba toda su familia.

Claro, su relación con sus hermanos y sus padres siempre fue un poco (o muy) tensa; pero había algo más allá de todo eso, además de lo evidente, cada uno de sus parientes parecía vivir en un mundo extraño, donde a veces creía que solamente él sentía el aura cortante y las cosas fuera de lugar.

A él, los "secretos familiares" no le llegaron de golpe, no fue dramático, como esas películas donde el protagonista se entera del más oscuro secreto de su linaje en una noche de lluvia eléctrica. Aunque le hubiera gustado que fuera así, habría sido teatral.

La verdad es que esos detalles no se le habían ocultado exactamente, sino, que todos lo habían visto, vivido, o entendido en algún momento, y hablaban de ello en voz alta, sin dar la explicación del asunto, porque ya lo tenían por sentado.

Fueron cosas de las que se fue enterando poco a poco por su propia cuenta, a través de pláticas que no entendía del todo entre sus hermanos o sus tíos, si hubiera sido uno de esos niños inteligentes habría notado los intercambios de miradas, el cambio de voz, de porte o de elección de palabras. Theon nunca fue bueno descifrándolos, entonces lo aprendió mediante las más evidentes pistas, como las bromas disfrazadas de chistes inocentes.

Lo primero que aprendió, fue a alejarse bastante del tío Euron. Su madre siempre se había mostrado reacia a dejarlo ir en su compañía, y, en general, de cualquiera que no fuera ella misma o sus hermanos y padre.

La verdad es que incluso de pequeño, pudo notar que Alannys se negaba más que nada a dejarlo un minuto fuera de su vista cuando el tío Euron estaba cerca.

Su madre siempre fue una mujer más que protectora, nunca lo dejó ir a dormir a casa de amigos antes de conocer a Robb, tampoco se podía quedar a solas con miembros familiares sin supervisión, a veces lo hacía, pero su madre se enojaba con ello. Claro, como un niño, era difícil entender el por qué.

En aquella época la curiosidad acerca de la razón por la cual sus tíos parecían casi asustados de Ojo de Cuervo, el apodo por el que Theon lo conoció, era enorme, pero entendió que era uno de esos temas que no se debía tocar si no se sabía de ellos.

Además, no quería quedar como un idiota, incluso de pequeño, tenía miedo de preguntar algo que todos parecían saber menos él.

Fue muchos años después, con ayuda de ciertos comportamientos, susurros, y demás acciones pequeñas que se dio cuenta de que no era solo una sensación suya.

Algo estaba mal con su familia, y uno de los puntos importantes de ello era el tío Euron.

Pudo comprender la verdad cuando realmente observó la manera en que Euron miraba a su tío Urrigon, con una lascivia desagradable, enfermiza, casi burlesca, soltando comentarios fuera de lugar, obscenos y nauseabundos. Su tío Urri siempre huía de él, se encerraba y parecía tener arcadas, Aeron estaba siempre de su lado en aquel entonces, antes del accidente en el bote que lo dejó con la vida en el sacerdocio.

Si tuviera que decir que es lo que más le sorprendió del asunto, fue que él era el último en enterarse, y que nadie hacía nada.

Todos sentados en la misma mesa, mientras su padre interpretaba el comportamiento de Urri como una debilidad, con su tío Victarion disgustado y Euron riéndose entre dientes. Todos sabían, pero nadie se movía.

Después de eso, definitivamente mantuvo una distancia más que abismal con Ojo de Cuervo. Muy a diferencia de sus hermanos, que eran de una madera muy diferente a la de él, bastante más parecida a la de su padre y a Euron.