BRUTAL (Thramsay)

Quemaduras

Entre las antiguas costumbres de las Islas de Hierro, la poligamia no es tan extraña como en otras culturas.

Es una tradición antigua, en parte guiada por la religión, y en parte por sus viejas costumbres. El Dios Ahogado dicta que un hombre puede tener tantas esposas como le sean posibles proveer con dignidad; hacía siglos los isleños robaban las esposas de otras partes, las esclavizaban y demás.

Claro, las mismas mujeres de las costas se vieron robadas de alguna u otra forma de vez en cuando, pero seguía siendo poco a comparación con la cantidad de esclavas que llegaban de otras partes.

En la actualidad, es un tema mucho más sencillo: los hombres buscan esposas, se casan con ellas, las mantienen, si quieren más, y tienen los medios para ello, siguen buscando nuevas. Tienen hijos, el ciclo se repite.

Hay varias leyes de protección para tales matrimonios, sobretodo debido a las jerarquías que se establecen en esas uniones, la esposa de roca siempre en la cima, las de sal tienen una posición más parecido a las concubinas que otra cosa, pero siguen siendo legales y oficiales.

Es por eso que, en su cultura, la infidelidad es un insulto enorme, mucho más que en otras culturas. Cuando los hombres ricos y casados tienen aventuras de una noche es algo difícil de mencionar. Teniendo la posibilidad de tomar más esposas, es casi una burla para la desposada principal, como si fuera solamente para hacerla el hazmerreír.

¿Para que esconderlas? ¿para que hacerlas amantes cuando pueden introducirlas a la familia? Simple: para insultar a la esposa de roca

Cuando Theon era un niño, nunca pensó mucho en ello, a pesar de que la poligamia era algo avalado, era difícil que una persona tuviera suficiente dinero para mantener a más de una esposa (y los hijos, por supuesto).

Un niño no suele pensar mucho en ese tipo de cosas, es normal. Jamás se imaginó a su padre o a su madre en situaciones como aquellas.

Claro, cuando los problemas entre sus padres iniciaron, él le dio una variedad de razones, pero por su mente jamás cruzó la idea de la infidelidad.

Balon Greyjoy amó a su esposa alguna vez, todos lo decían, tanto que le dio a su primer hijo el nombre del hermano de Alannys, y jamás había tomado esposas de sal a pesar de que había sido conocido como un mujeriego y un jugador en su juventud.

Alannys también lo amó, por eso se casó con él en primer lugar cuando no eran más que un par de jóvenes aventureros.

Por supuesto, el tiempo hizo que su relación se distorsionara de muchas formas; Theon jamás conoció al “verdadero Balon”, como todos sus hermanos decían.

Siempre le aseguraban que su padre era mucho más grosero, desagradable y huraño que el que él vio en su infancia. Ni siquiera quería imaginarlo.

De todas maneras, las mujeres encontraban algo en él cuando era joven.

Su madre por otra parte, siempre se había mostrado como una mujer celosa (lo cual es estúpido, porque ella siempre hacia sentir al pequeño Theon como un ridículo cuando él se mostraba celoso de algo), de esa forma es que se veía paranoica en cuanto a los contactos de su esposo con las demás mujeres.

Fue en preparatoria cuando Theon comprendió que su padre, en realidad, pudo haber cometido una infidelidad -o más- en su relación con Alannys.

Recuerda lo que alguien le dijo en su salón de clases cuando mencionó a su compañero su lugar de origen.

“Dicen que los isleños tienen muchas amantes, una en cada lugar”

Y a él le pareció estúpido, sus tíos ni siquiera estaban casados, a excepción de su tío Euron y sus esposas de sal -jamás una esposa de roca-. No quiso creer algo como eso de su padre.