Capítulo 5

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Caminé decidida, no sentía temor, de hecho, sentía como una energía corría a través de mi cuerpo, como una adrenalina iba acrecentándose dentro de mí....

Corté la distancia entre nosotros y lo miré a los ojos con firmeza. Sus ojos azules me dieron una sensación helada, como agujas clavándose en los hueso, pero la sensación cálida era tan fuerte en mi pecho que ese frío no me era desagradable.

Sonreí y pude ver el desconcierto en su rostro. 

-¿Tienes miedo Dann? -Inquirí con una mirada desafiante. Estaba decidida, sentía la sed de venganza y eso no me permitía sentir temor. Había perdido todo por su culpa... mis recuerdos, mi familia, mi vida... 

Necesitaba descargar todo el rencor que guardaba dentro de mí, toda esa inestabilidad que había crecido en mi mente...

-Cuanto tiempo hermanita. -Su voz gélida sonada igual de desafiante que la mía. Su desconcierto desapareció y me devolvió la sonrisa. Una sensación desagradable me recorrió la espina dorsal. 

Apreté los puños al ver como tomaba la espada que llevaba en su espalda. Según las historias que había investigado solo había un tipo de ángel al que correspondía esa espada dorada. Era un ángel de la muerte, usaba esa espada para encaminar las almas de los humanos, esa espada podía tocar sangre humana pero... ¿podrá tocar la sangre de otro ángel? Sonreí al ver que me desafiaba con su espada. 

-¿Eres tan cobarde que me atacas con un arma sin que yo pueda defenderme? -Pude ver como apretaba la mandíbula y eso me hizo sentir una satisfacción enorme.

-No estoy aquí para pelear contigo... -Espetó en un tono neutro. -Estoy aquí para reestablecer el orden entre el cielo y la tierra, un humano no puede tener el alma de un ángel.

-Pues al parecer nuestro padre no pensaba eso. -Inquirí con ironía, pude ver como su miraba iba ensombreciéndose al mencionar a nuestro padre. -Él creía en que ambos mundos podrían llegar a convivir, sino no se hubiera involucrado con una humana. 

-Ni siquiera lo conoces... -Refutó mientras apretaba las manos en el mango de su espada. -Supones esas estupideces sacadas de tu limitada mentalidad humana.

-Buen punto. -Inquirí asintiendo. -No lo conozco, pero ¿Acaso tú si? -Cuestioné desafiándolo, pude ver el enojo en su rostro, claramente necesitaba saber si tenía un lazo con nuestro padre para poder seguir con el plan que estaba construyendo en mi mente. Necesitaba saber si mi padre conocía a Dann, o él simplemente juega a ser un Dios por voluntad propia.

-Nadie puede tener acceso a los tres querubines. -Inquirió con una expresión sombría. -Es algo que todos los ángeles saben, pero como eres una simple humana comprendo tu ignorancia.

Sonreí al escucharlo. Esa era exactamente la respuesta que necesitaba. De pronto sentía como la calidez iba incrementándose en mi cuerpo, sentía la energía fluir aun más fuerte. Lo único que necesitaba ahora, era que Dann me atacara con su espada. Respiré profundo tratando de concentrarme. Tenía una sola oportunidad para que mi plan funcionara, de lo contrario yo terminaría muerta nuevamente por manos de Dann. No había lugar para un error. No contaba con ese lujo.

Y así sin más pensamientos, empecé a correr. Corrí hasta él intentando abalanzarme sobre él. Obviamente no esperaba atacarlo con mis manos, simplemente esperaba que él me atacara a mí. Pude divisar la sorpresa en sus ojos, antes de que otra expresión pasara por su rostro abalanzó su espada sobre mí. Automáticamente cerré mis ojos e intensifiqué toda esa energía que me rodeaba. Centré toda esa fuerza en un solo objeto... Su espada.

-¡Jay! -Oí la voz de Iam y automáticamente abrí mis ojos.

Me sorprendí al observar a Dann con la espada a centímetros de mi rostro. El objeto estaba totalmente paralizado. Dann intentaba moverlo, pero la espada ni siquiera se inmutaba. Levanté mi mano y tomé el mango de la espada. El mango tembló. Yo sí podía moverla. Antes de que Dann reaccionara le arrebaté por completo la espada y me abalancé hacia Iam cortándole en la parte izquierda de su brazo. Una herida de unos veinte centímetros se abrió empapando la espada con su sangre. Sangre de un ángel caído. Un ángel al fin de cuentas... y no cualquier ángel.

CONTRITUM (2°Parte #Darksoul)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora