Caminé hasta la ventana y abrí las cortinas, la luz se impregnó y cerré mis ojos de manera instintiva. Era un precioso día. Sonreí mientras estiraba los brazos adormilados. Bostecé y luego me giré hacia la cama con pasos perezosos . Se me paró el corazón por un instante.
-Dios, no sé si es un ángel o un dios griego. -Susurré mientras observaba a Iam acostado en la cama con los ojos cerrados, sus pestañas negras y sus labios rojos en contraste con su piel pálida lo hacían ver tan sexy.
Ya habían pasado 3 días desde que había recuperado mis recuerdos. Desde entonces no perdimos el tiempo. Estaba pegada a él como si fuera una garrapata. Anabett no había vuelto a aparecer desde ese día. Según Iam era normal de ella desaparecer de vez en cuando. La teoría de él es que tenía un amorío escondido, algún hombre "desafortunado" según él. Yo solo reí, al parecer durante estos años se habían hecho buenos amigos, o algo así. El punto es que agradecía a Anabett por haberse ido y así dejarnos ese tiempo para nosotros dos solos. Sentía como si nunca me había alejado de él, como si las cosas nunca hubieran cambiado. Era extraño, porque claramente tenía 2 vidas entrelazadas, 2 personalidades compitiendo dentro de mí... bueno si contamos a Lunn, son 3 personalidades. Esto de la reencarnación era algo difícil de manejar. Suspiré mientras me recogía el pelo y me acercaba a Iam.
-Bueno días. -Susurré mientras le daba un beso en su nariz. Abrió sus ojos y me dedicó una media sonrisa. Definitivamente me sentía en el cielo.
-¿Dormiste bien?- Me preguntó mientras se levantaba de la cama.
-Bueno, teniendo en cuenta tus ronquidos.... -Carraspeé e hice una mueca de disgusto, automáticamente él levantó una de sus gruesas cejas, como si no creyera lo que estaba oyendo.
-Sabes que yo no duermo, por ende, no ronco. -Aclaró mientras se cruzaba de brazos.
-Eso no parecía ayer. -Susurré mientras intentaba aguantar la risa.
-¿Qué dijiste? -Inquirió mientras se acercaba a mí de manera amenazadora.
-Nada. -Exclamé con una sonrisa inocente.
Antes de que pudiera decir algo más se abalanzo sobre mí y me empezó a hacer cosquillas.
-¡DEJAME! -Exclamé mientras intentaba deshacerme de su agarre entre risas. -¡Sabes que odio las cosquillas! -Sentía que me iba a mear de tanto reírme, grité, pataleé, pero todo fue inútil. Luego de varios intentos me rendí y ahí como si nada, me soltó. -Te odio. -Susurré mientras me levantaba de la cama y me acomodaba el cabello.
Al menos no se te salió un gas entre tantas risas, hay que ver el lado positivo.
Suspiré agotada mientras me tapada la cara con las manos.
-¿Sabes que antes las cosquillas eran denominadas como una forma de tortura? -Explicó emocionado. Automáticamente lo fulminé con la mirada.
-O sea, ¿me estabas torturando y lo admites orgullosamente? -Observé como se quedó pensando unos segundo antes de responder.
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CONTRITUM (2°Parte #Darksoul)
Paranormal"Y cuando te busques y no te encuentres, recuerda de donde vienes, para descifrar a donde iras..." •Segunda Parte de Dark Soul •Esta obra se encuentra registrada y pantentada queda prohibido el plagio de la misma. @Copyright