El secreto de Ikki

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Narradora
Un joven peli verde se encontraba colgado de cabeza en el viejo árbol del orfanato, mientras hablaba dirigiéndose a su collar que le colgaba hacia la misma dirección que su cabello.

-*Suspira* Hola mamá, espero que me estés escuchando donde sea que estés, quiero hablar contigo...sobre...las chicas, no se por qué, pero este tema no es muy sencillo para mí, le he preguntado a papá Hideyoshi, y él siempre me termina diciendo lo mismo, es decir nada, nunca le entiendo a sus consejos, Ikki, me dice que solo sea yo mismo y el problema es que ni si quiera yo me conozco jajaja, mi mamá Akira, es una gran mujer, me gustaría que ustedes se conocieran, de hecho me imagino como es que serían su pláticas hablando sobre sus gustos, exponiendo a sus esposos, en fin, cuando hablo con ella sobre este tema, siempre termina en lo mismo, recordando a su último novio millonario qué cambio por Hideyoshi.

Sinceramente me gustaría conocerte, no tengo ningún recuerdo sobre ti, más bien sobre ustedes, Ikki me dijo que papá era un soldado médico, pero falleció cuando estabas esperándome, él me dijo que papá te dio su collar, después te enfermaste y se lo diste a Ikki para que lo cuidara, algunas veces siento una gran envidia hacia él, por qué si te recuerda y yo no... Bueno como te iba diciendo ojalá hubieras conocido a June, es una excelente chica es muy bonita y su personalidad es única, tal parece que si estoy muy enamorado de ella, pero no lo suficiente como para declararme.

-¡SHUN!, ¡¿estás aquí?!- gritaba Seiya interrumpiendo su charla, mientras entraba al patio trasero- ¡SHUN!

-¿Eh?, Seiya, ¿Qué haces aquí?- preguntó viéndolo de cabeza

-Mas bien, ¿Qué haces tu así?- respondió volteando la cabeza

-Soy Spiderman- dijo lanzándole una telaraña invisible

-Mejor dicho Batman o el doctor Morbius, basta de charla y baja de ahí que el profesor Shura nos va a regañar si llegamos tarde al primer entrenamiento- le reprendió mientras cargaba las mochilas- Apúrate que ya están ahí los demás solo faltamos nosotros

-Ya voy, ya voy- dicho esto se enderezó y con mucho cuidado caminó sobre la rama para después ir bajando de poco a poco por el tronco, después apoyarse en el columpio y por último saltar y caer al suelo de pie- Ya estoy, vámonos

-Wow, oye, ¿Cómo le hiciste? - preguntó asombrado el castaño

-¿Hacer que?

-Eso, subir y bajar del árbol

-Ah, fue sencillo, si quieres después te enseño- respondió mientras caminaban a la salida

-¿De verdad?- se emocionó el joven

-Si

Ya estando en el patio principal, se encontraron a Isaac y Eri junto con los niños

-Oigan nosotros ya nos vamos- anunció Seiya

-Bueno cuídense mucho, nos vemos después y muchas gracias por su ayuda, de verdad que si la necesitamos, pues Miho, Isaac y yo no hubiéramos podido solas- agradeció la rubia cargando a un niño

-Muchas gracias chicos- mencionó Isaac con un poco de dificultad puesto que traía como cinco niños encima

-De nada- dijo Shun algo a penado

-Por cierto, ¿y Miho?- preguntó Seiya extrañado

-No lo se, supongo que esta adentro hecha un caos y arreglándose el cabello para "Don Pez"- esto último lo dijo Eri en forma de broma, dejando confundidos a los muchachos

A penas iban a salir, cuando enfrente del orfanato se estacionó una limosina blanca, era tan blanca y brillosa que dejaba ciegos con su luz, de ahí bajo el magnate Julián Solo, quien traía, como siempre, unos lentes de sol y una gabardina azul marino que combinaba con su traje blanco con celeste y también venia acompañado de su asistente y amigo Sorrento, quien venia un poco más sencillo que Julián. Levantó la mirada y se encontró con Seiya.

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