𝐦𝐚𝐧𝐡𝐰𝐚

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 5

𝑨𝒚𝒖𝒅𝒂

Milena y Samantha pasaron las pocas horas que establecieron antes de despertar a todos, viendo resúmenes de películas que les aburriría ver, dibujando (Milena coloreando) y creando escenarios de lo que pudiera suceder mañana basándose en los canon.
También encontraron algunos detalles, pues al parecer, podía decirse que apenas estaban entrando en el arco de Hostel.

Durante todo el tiempo, el celular de Samantha estuvo en videollamada con el celular de Milena, su propia ¡Pad, la tablet de Milena y el ¡Pad de su abuela, vigilando a Hostel, Workers y los genios y el CEO, así como los libros se encontraban en medio de ellas.

De las cinco horas que pasaron, únicamente durmieron 30 minutos.

Cuando sonó la alarma, a 40 minutos para las 8:00, se bañaron rápidamente y metieron los libros en la caja fuerte que se encontraba escondida en una parte bastante secreta del closet.

—Ya—Samantha palmeó sus mejillas y salió del baño.

Milena termino de peinarse y se coloco cuatro pulseras en la muñeca derecha.

—¿Ya?—Pregunto Samantha mientras solo se pasaba el cepillo unas cuantas veces y tomaba una liga.

—Me siento más nerviosa que en mis quince—Dijo mientras tomaba la manija, intentando tener agallas.

—Tranquila Milanesa, tú puedes—Animó sin emoción, común de Samantha.

Al salir del cuarto, Samantha se quedó arriba y Milena bajo.

Samantha tocó la puerta en dónde se encontraba Big Deal, fue abierta por Kyung-Heon.

다른 사람들을 깨울 수 있습니까?

—Gracias—Dijo de último y fue a la segunda puerta, Hyung-seok grande fue quien abrió la puerta.

Repitió el mismo audio y entro a la habitación para llegar al pasillo, tocó la primer puerta y Yohan le abrió, hizo lo mismo y antes de dejarlo contestar se giró hacia la otra puerta que fue abierta por Miru, está asintio y Samantha continuo así hasta la última última puerta donde se encontraban los ejecutivos no tan importantes de Workers.
Algo que Samantha no cálculo bien

Big Deal salió y bajo fácilmente, más hubo cierta tensión entre Jaewon y la mayoría de Workers, además de que Yohan parecía molesto de tener que ver cara a cara a Jin-Sung y Mi-jin.

Milena observo confundida como por alguna razón Jaewon y Workers bajaban casi al mismo tiempo, revueltos a diferencia de hace unas horas.

—¿Qué les pasa? ¿Durmieron en el piso?—Pregunto Joongoo al ver que la mayoría de Workers estaba irritado.

—En realidad, deberíamos preguntar eso a las señoritas—Habló Dogyu con su extraña sonrisa.

Todos observaron que las jóvenes parecían verse peor que el líder de Hostel B ,O-chung, y el apenas dormía.

—No se que dijeron, pero siento que dijeron algo de nosotras—Murmuró Samantha mientras su prima asentía.

Milena saco su celular, busco una aplicación y sonrió al encontrarla.

—Vale la pena borrar Pou por esto—Se intento convencer a si misma mientras entraba a la aplicación que descargo hace unos minutos.

—Sirve bastante bien—Le dijo Samantha mientras la veía lamentarse por borrar a su Pou.

—Ya casi llegaba al nivel 100—Escribió  en el traductor lo que ya tenían planeado.

—Espera, ¿No es muy directo?—Leyó el mensaje.

Todos las observaban esperando la traducción de lo que escribían.

Jong-Gun se encontraba detrás de Dong-soo, observando el cuarto de lavado con la misma curiosidad que hace unas horas.

¿Qué había sido aquella cosa diminuta que se movió entre las sombras?

우리가 가진 옵션을 제공하기 전에 확인하고 싶습니다, 우리의 ¿도움을 수락하시겠습니까?

A diferencia de la primera vez, no asintieron al instante y se vieron entre si.

Samantha dejo su celular en la mesa donde todos pudieran verlo, con el teclado en coreano.

DG se acercó y fue quien escribió cuando los demás se tardaron.

Necesitamos un momento para pensar.

Ambas primas asintieron, Milena apagó su celular y lo metió en el bolsillo de su short.

—???—Samantha la observo preguntado por su acción.

—No se, ¿confianza?

8:04 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑚𝑎𝑛̃𝑎𝑛𝑎

Ambas vieron como todos se miraban entre si, Hyun, Hyung-seok y Gi-myung intentaron acercarse al celular al mismo tiempo pero se detuvieron.

—¿Todos estamos de acuerdo en que su ayuda es necesaria?—Yujin tomo el celular.

Aceptamos su ayuda

Samantha se acercó al celular para corroborar que esa había sido la traducción, intercambio los idiomas para confirmar que no había sido errónea.

—Aceptaron nuestra ayuda...Ay dios mío—Milena se mostró tanto emocionada como arrepentida, aunque ambas ya habían empezado a preveer los grandes problemas que tendrían.