𝐦𝐚𝐧𝐡𝐰𝐚

capitulo 13

Samuel y Eugene se encontraban sentados en el bar de la piscina, bebiendo sus respectivas bebidas.

—Necesito más información de esas dos...Intenta seducir a alguna, al parecer Samantha es mucho más ingenua, ve  tras ella.—Habló eugene en coreano, el bartender no lo hablaba por lo que no podía avisarle a las adolescentes de los terribles planes.

—Pero Samantha parece atraerle más Jake, no es así? Milena parecer ser del tipo que le gustan como Samuel, solo pon atención a como te ve—Se metió Mitsuki en la conversación.

—Yo me encargare—Sonrió Samuel terminando su bebida de un tragos y adentrarse al hotel.

Al día siguiente, nuevamente todo parecía relajado (o aburrido).Por lo que Samantha al ver la monotonía decidió sugerir un paseo en el malecon, idea que fue rechazada por Will sin dudar y que Milena medito bastante.Finalmente terminaron siendo convencidos ya que los huéspedes tenían un comportamiento tranquilo en estos días.Un tranquilo paseo no les haría mal y tampoco pueden tenerlos encerrados todo este tiempo, se volverán locos.

Luego de volver a juntarlos todos en carro, tardan pocos minutos en llegar al malecon donde empiezan a caminar todos los grupos un poco dispersos.Decidieron dividir a los grupos para tener un montonadero en medio del camino, y por mera casualidad, Milena se encargaba de Workers.

Samuel iba a aprovechar esta oportunidad y se acercó a Milena para poder ganarse su confianza.Algo que lo tenía muy cuidadoso era que ella probablemente tenía información de él por los libros sin embargo no sabía hasta dónde.

—¿necesitas algo?–Pregunto Milena al verlo a su lado mientras el resto caminaba por delante, asombrados por los paisajes.

—Solo quiero conocer más a nuestra benefactora, es todo–Le sonrió muy amablemente.Por supuesto Milena no creyó esto en absoluto y se sentía incomoda pues conocía la historia de Samuel y su verdadera personalidad.

—Ya veo, ah mira allá—Señaló a un puesto de elotes, Samuel lo vio confundido y solo grito al grupo que se detuvieran un momento.Habian llegado a un lugar con varias bancas, al ser jueves, no había muchas personas paseando y las pocas que habían eran turistas.Asi que pudieron sentarse todos.—Ya que quieres conocer, acompáñame

Samuel la siguió hasta el puesto donde ordenaron elotes para todos y Milena puso en un plato un poco de muestras de los condimentos comunes para poner a Samuel a repartirlas.Basicamente lo puso de mesero.

Al final de que todos los elotes estuvieran, los fueron entregando uno a uno y el puesto no estaba exactamente cerca de aquellas bancas donde se encontraba el grupo.

Finalmente luego de cerca de una hora repartiendolos, la fachada amable que Samuel intento mantener se estaba desmoronando.

—Este es el último–Milena le entrego el elote al cansado Samuel, es decir, será fuerte pero nunca había tenido que fingir ser amable mientras repartía elotes.

Este se levanto de golpe, se encontraba al limite su, casi nula, paciencia;Milena le sonrió lo que lo dejo anonado debido a que en la última hora solo se la había pasado regañandolo por entregar incorrectamente los pedidos.—Disfrútalo, lo mereces.Serias un buen elotero a mi parecer—Rió suavemente mientras le daba algunas palmadas en el hombro.Se dio media vuelta mientras Samuel se sentía aturdido, definitivamente había ido a restaurantes callejeros como los más elegantes, sin embargo, ningún sabor se asemejaba al de ese pequeño snack que ni siquiera había sido preparado con tanta dedicación entonces ¿Por qué le sabía tan bien?