One Shots de Casi Todo

Aldnoah Zero

Cuarto One Shot

Personajes: Inaho Kaizuka x Asselyum Vers Allusia

Advertencia: Ninguna jeje

Tipo: Personaje x Personaje

Ella le había confiado su identidad, parte de su conocimiento y el poder de activar el Aldnoah asi como sus sentimientos, y sin embargo la había perdido, aquel murciélago se la había llevado y la había separado de su lado, claro que dolía, y claro que la extrañaba, recordaba con dolorosa claridad su dulce cara sonriendole, sus pucheros y sus palabras de agradecimiento, recordaba el momento en que le había salvado la vida en aquella ducha y la promesa secreta de permanecer unidos; y sin embargo nada le dolía tanto como recordar el momento, aquel último momento donde sus manos habían estado unidas con la alegría del exito de la misión y con la premisa de que debían escapar, cuando de un disparo Asselyum había sido obligada a soltarlo, el vacío que sintió en aquel momento lo ha acompañado desde entonces.

Pero con una guerra interplanetaria separandolos, su cabeza no podía pensar demasiado en otra cosa que no fuera terminar con esta masacre y que la gente que amaba estuviera a salvo, y era una lástima que la princesa no se contará entre esas personas, aún no sabían dónde estaba y su burda imitación televisiva no aliviaba su dolor.

Al parecer había perdido parte de sus memorias, pero recordaba con claridad como aquel joven la había cuidado, la había escuchado, y le había explicado la dispersión de Rayleigh.
—Inaho-san— aquel nombre escapo de sus labios otra vez antes de que ella pudiera asimilarlo, le resultaba analgésico y liberador.

—¿Sucede algo, Princesa?—la pequeña Eddelrittuo la veia preocupada, Asselyum le sonrió.

—No ocurre nada, Eddelrittuo, solo pensaba un poco— la niña le sonrió aliviada y siguió con sus labores, fingía no escucharla cada vez que pronunciaba ese nombre, tenía la esperanza de que aquellos sentimientos fueran borrados o al menos redirigidos hacia alguien más, pero cada día eran más fuertes.

Aunque la princesa amaba aquel jardín comenzaba a sentirse encerrada por las paredes verdes, asfixiada por la constante vigilancia de Slaine, y comparado con aquel sentimiento de libertad que experimentaba al lado de Inaho, sus deseos de volver a la tierra incrementaban.

La guerra estaba en su punto más alguido, haber llegado hasta el espacio era toda una hazaña y pronto se definiría el destino de ambas razas, cuando por fin volvió a verla su corazón bailo de felicidad, estaba seguro de sus latidos podían ser escuchados por cada persona en esa nave, y sin embargo se concentro tanto como pudo en lo que la dueña de aquella cadena de emociones le decía.

—Tengo un último favor que pedirte, por favor, salva a Slaine Troyado de su cadena de infelicidad, por favor—ella lloraba ¿un último favor?¿Era el adiós?¿Otra vez se separaría de ella? No quería, su corazón definitivamente no quería, quería rogarle que regresara con él, que escaparan de alguna forma y vivieran vidas tranquilas pero su cuerpo que gritaba por piedad, lo hacía entrar en razón, su corazón solo gritaba estupideces, su cerebro en cambio la escucho y su cuerpo, su cuerpo solo quería dormir, estaba tan cansado... Y ¿como podía negarle algo a aquella chica de ojos esmeralda cuando había pasado tanto tiempo pensando en ella? Cuando había pasado tanto tiempo amandola. Claro que cumplió su petición pero le hizo saber que esperaba que no fuera la última vez que se vieran, ambos sabían que tendrían que pasar muchas cosas más antes de volver a verse, tal vez demasiadas.

Se alejaron con las esperanzas y los corazones rotos, se volverían a ver, claro, pero era cristalino que no lo harían en condiciones de amarse libremente. Ella era consciente de que para conseguir el favor de la mayoría de los Caballeros Orbitales, debía contraer nupcias con alguno de ellos y así mantener su poder estable... Eso la alejaba de Inaho, él sabía que tenía que tratar con Slaine, sus amigos y tratar de organizar su vida antes de verla, pero nada de eso sería fácil.

No pudo ver la boda galáctica de la ahora emperatriz de Vers, tomo como excusa el trabajo y despareció del radar de su hermana y amigos todo el día, había recibido un mensaje de ella semanas antes anunciando su boda y asegurandole que lo amaba pero que era mejor para todos que ella fuera una poderosa y fuerte emperatriz con el apoyo de alguien influyente en su planeta, él estaba de acuerdo y no puso objeción alguna, sin embrago el saberse amado por la chica que él amaba pero no tenerla a su lado le quemaba por dentro.

Cuando por fin se vieron tras varios años de tratados, reconstrucción y el nuevo portal de Aldnoah, la primera mirada que compartieron fue la que más quemo, tan ardiente como el primer día que compartieron sus sentimientos, la segunda mirada estuvo llena de nostalgia, la tercera venía cargada de dolor y la cuarta solo traía amistad con ella.

Listo este one-shot, muchas gracias por leer.

Bye 💫