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Se escondían en los callejones.

La mayor los estaba guiando.

En un momento, K' pudo sentir su respiración algo pesada, como si algo le estuviera presionando el pecho y no le dejara respirar bien. Fue algo momentáneo, pero incómodo.

Estaban avanzando con cuidado, cuando de nuevo escucharon caballos.

Trataron de huir, pero lograron rodearlos antes de que escaparan.

Leona estaba aterrada, casi llorando, mientras los otros dos trataban de buscar alguna forma de salir vivos.

Sin aviso alguno, bombas de humo explotaron, rodeando a todos.

Betty sujetó a la chica, cayeron al suelo y la mujer la cubrió con su cuerpo.

Se oían quejidos de dolor y uno que otro disparo de la escopeta, así como el relinchar de los caballos y el galope de los mismos.

Después de unos segundos que parecieron eternos, la mayor ayudó a la contraria a ponerse de pie y salir del humo.

Al hacerlo, vió a dos chicos encapuchados con una vestimenta negra bastante curiosa. Luego de unos segundos, apareció el platinado, pero lucía algo agotado.

Antes de poder decir algo, aquellos dos les pidieron que los siguieran.

Mientras caminaban, Leona miró detrás de ellos, y vió cómo otros encapuchados aparecían y se llevaban los cuerpos. Se quedó totalmente confundida.

Llegaron a lo que parecía un templo abandonado.

Entraron y los chicos abrieron un pasadizo secreto, guiando a sus acompañantes por aquellas escaleras que iban en bajada.

Leona miraba todo con asombro y emoción. Sin embargo, se dió cuenta que K' no estaba bien. Le costaba trabajo respirar así como mantener el equilibrio. Sabía que no era bueno, pero tampoco estaba segura si debía preguntar teniendo a aquellos dos ahí cerca.

Finalmente, llegaron a lo que parecía una sala, en dónde estaban dos personas que K' reconoció de inmediato, y por ello, terminó desmayándose.

(Minutos después)

Despertó con algo de pereza. Se quedó mirando al techo unos segundos, y después se levantó de la cama dónde estaba.

Por unos instantes perdió el equilibrio, pero logró sujetarse de la pared.

A paso lento salió de la habitación. Al hacerlo, escuchó unas voces, así que decidió ir ahí.

Llegó a la sala y vió a todos conversando tranquilamente.

Leona sintió la presencia del chico, volteó, y al verlo de inmediato fue a ayudarlo.

Leona: Debiste quedarte en la cama.

K': Perdón, mamá.

La chica le dió un zape.

Lo ayudó a sentarse en un sillón para dos, y por obvias razones, la chica se sentó con él.

Betty: Chicos, ella es Leona y el otro chico su novio

Ambos: KHE!?

???: Un gusto!

Betty: Leona, chico bonito, la de cabello negro es Zarina, el que está a su lado es Nelson, y ellos son sus hijos, Isla y Shun.

K' sacudió la cabeza, tratando de procesar aquellas palabras.

Los últimos dos mencionados se retiraron la capucha, dejando ver que, físicamente, eran los mismo que él conocía, lo único que tenían diferente era que el cabello de ambos era totalmente blanco, así como que lo tenían largo y recogido en una trenza.

Behind The MirrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora