Reencarnando en Hunter x Hunter /A Killer Among Hunters/ (Reescribiendo)

Capitulo5: Payasos x Escapar x Licencia desconocida

Hay muy pocas cosas que sacaban a Jack de sus cabales. Y eso sus compañeros lo sabían muy bien, por lo tanto, nunca permitirían que aparecieran en el espacio personal de Jack. Ya que eso causaría problemas catastróficos y no solo un par de cadáveres de los cuales podían deshacerse fácilmente.

Una vez cuando intentaron llevar al chico a un parque de diversiones para relacionarlo con niños de su edad, termino con el cierre permanente del parque por la cantidad masiva de muertes ocasionadas, si bien hubo víctimas inocentes acabaron con toda la red de trata de personas oculta dentro.

Fue desde ese momento que para evitar derramamiento de sangre excesivo fue mejor prevenir. Toda la masacre empezó después de que Jack fuera llevado por un "guarda de seguridad" a una carpa llena de payasos que eran los encargados de secuestrar a los niños. No fue necesaria la mención de lo que paso después, pero todo empeoro cuando se libero un muñeco inflable de tamaño King para que Jack viera la necesidad de incendiar todo el lugar.

Y tras todo eso, ver como Hisoka intenta despertar al niño no terminara en nada bueno.

Uno. Invadió su espacio personal. Dos. Con todo ese maquillaje encima no había duda de que parecía un payaso. Un payaso con pinta de violador. Y tres. La habitación estaba llena de muñecas de porcelana.

Aun si Jack no tenía miedo a asesinos seriales, terroristas suicidas y científicos psicópatas, nada lo había preparo para este momento. Jack nunca se llevaría bien con los payasos y las muñecas.

. . . . . . . . .

Hisoka sentía curiosidad, el nen interior estaba en caos, pero tras una inyección su recuperación estaba acelerándose. Su tenacidad lo sorprendió y su uso temprano de nen fue la guinda del pastel. Se relamió los labios, quería que esta frutita madurara cuanto antes.

Quiso tomar la temperatura para ver si la fiebre del niño había bajado. Mal momento. Nada mas entrar en contacto con su piel, el abrió sus ojos.

No sabia como describir su mirada, ¿Sorpresa, odio y pánico?

-Estas despierto frutita - Hisoka sonrío al ver como sus pupilas se agrandaron más. Lastima que no por mucho tiempo. Con un movimiento brusco lo empujo y salto de la cama con dirección a la puerta. Hisoka se sorprendió por la fuerza que ejerció con su pequeño cuerpo, no lo persiguió por que rápidamente lo atraparía y esquivo una bomba que iba en su dirección. Segundo error. Algo parecido a una lata de refresco rodo a sus pies, solo alcanzó a ver la puerta cerrada antes de que explotara.

. . . . . . . . .

Recuperé la conciencia cuando sentí una mano en mi frente, lo primero que vi fue el rostro de un pedófilo. No, un payaso. Aunque me aturdí por un segundo no pensé en nada más que sacar una bomba y tirársela encima, pero el pedófilo era fuerte esquivándolo fácilmente.

Aun con el dolor persistente saqué una bomba modificada y la hice rodar mientras corría a la puerta. Cuando la cerré quise saltar por la ventana, si bien en otros casos mataría a esa abominación, ahora era muy débil para enfrentar a Hisoka.

No seria problema saltar desde el segundo piso, pero el foso ahí abajo me decía que no terminaría bien. Cambie de dirección a las escaleras mientras sacaba unas granadas y las lance en sucesión al ver al pedófilo excitado, destruyendo todo el pasadizo.

-¡Aléjate maldito payaso pedófilo!

En la sala principal estaban 5 personas, no note quienes eran por tanto polvo, pero tenía una suposición. Y al ver la puerta principal heche a correr mientras sacaba otras granadas.

-¡Con permiso y gracias!. - Modales, ante todo, tiré las granadas y salí del edifico que se demolía a mi espalda. Corrí sin un lugar en específico , había dormido por medio día. Lamentablemente la vida es cruel y nada mas girar en una dirección choque con un gigante, que me detuvo en mi ansiada huida. Ugovin no parecía reconocerme solo chocando conmigo, pedí disculpas y este me pregunto qué pasaba.

-Un payaso pedófilo me secuestro. Logre escapar cuando el edificio en construcción exploto.

-El edificio exploto- Ugovin se fue hacia la desdichada guarida de las arañas mientras yo cambiaba de dirección. Mi cuerpo estaba reforzado con nen, si bien no sé cómo, aun entendí su función básica.

Cuando me canse, entre al edificio más cercano colándome por una ventana. Una biblioteca, fui al almacén que estaba a unos estantes de la ventana y cerré el lugar con llave antes de tomar aire.

-Este cuerpo inútil- Era un buen momento para inventariar mis cosas, solo un día y ya había vivido lo que no viví en casi un año. Granadas modificadas dos, inicialmente cinco. De los antídotos quedaron 9.

La droga de aceleración celular solo puede usarse tres veces en la vida sino causaría una mutación negativa en el cuerpo, por eso era algo difícil de usar. Ahora quedan 4. Acerca de las bombas que parecían pelotas de ping pong. Viendo como las derroche, de las 20 solo quedaron 13.

. . . . . . . .

Mientras Jack revista sus cosas recordó la licencia de cazador que estaba en uno de los libros. Si bien no quería llevárselo con él, fue útil cuando buscaba en la computadora. Saco un paquete de galletas y una botella de agua. No había almorzado y en su huida gasto muchas calorías.

Al terminar, abrió la puerta ligeramente. Este lugar cerraba temprano por lo que las luces ya estaban apagadas. Acercándose a la zona de ordenadores, encendió una y escaneo la licencia de cazador. Al ingresar la contraseña no pedo evitar relacionar, la contraseña pegada al reverso del libro, la licencia guardada dentro del libro mas lujoso y ahora el que aún no haya sido bloqueada. Acaso el dueño era un idiota.

Mientras Jack buscaba vuelos y reservaciones con una licencia robada. Su verdadero dueño había contratado a especialistas de nen para ubicarla. Siendo estafado una y otra vez.

No por ser el hijo del líder de una mafia, lo respetarían, si su padre supiera que perdió su licencia de cazador es probable que fuera sacado de la línea de sucesión. Cuando uno de ellos lo llevo cerca de una biblioteca estaba a punto de pegarle un tiro en la cabeza a la persona que tenía frente a él.

Al estar demasiado impaciente rompió la puerta antes de entrar. Cosa que sin duda alerto a quien yacía en su interior.