Decisiones.

Prólogo.

Bueno, hola, no he escrito algo en muuuuuuuuucho tiempo, años, de hecho jaja, así que espero no sea aburrido y puedan disfrutar de un rato de drama.

Los personajes que se involucran en esta historia, no son de mi propiedad, yo solo creo historias raras, locas, dementes y dramáticas con ellos como protagonistas.

Bien, dicho esto.

Espero les guste.

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Elecciones.

Prólogo:

¿Duele? No, no duele, ya no... el dolor dejó este cuerpo desde hace mucho, y si no fue así, es porque aprendí a vivir con él.

¿Cómo? Fácil, decepción tras decepción, pérdida tras pérdida que se fueron enlistando en mi corazón, no, yo no era frío, no era seco, ni siquiera difícil de tratar, pero ¿acaso alguien se detuvo un momento a pensar en mí?
No en mí como futuro líder, no en mí como visiblemente era el hijo no aceptado por sus padres, no en mí como el hombre de mal carácter y peligrosa mirada, sino en aquel que estaba detrás de todo eso... aquel que ansiaba el tacto dulce de una madre, un beso, una caricia sincera, una donde se viera que le importaba y me amaba sin importar lo que hiciera... la mirada aprobatoria de un padre, una hermana que me prefiriera al hermano no sanguíneo... es decir, aquel que era yo en realidad.

Aquel que vio como su padre, guía y modelo a seguir prefería a alguien mas, solo consiguiendo sin importar sus esfuerzos, "no entender el lema de la secta", ser siempre el segundo lugar aunque él siempre dejara en claro que nunca pensaría algo así. Aún ahora, me sigo cuestionando si aquellas palabras serán ciertas o no.

Miré diariamente como mi apoyo principal, mi hermana mayor, prefería ocultar, solapar y proteger a aquel que no era su hermano de sangre... incluso a mi madre, que me exigió más que a cualquiera y  que pese a mis intentos, no parecía nunca poder ser suficiente comparado con el...

Perdí a mis cachorros cuando niño, es verdad que gané un hermano, un cómplice, un amigo, pero también, alguien que sin saberlo, me apuñalaría por la espalda con esas palabras tan duras, aunque conociéndolo, seguramente lo haría sin darse cuenta de las cosas, sí, así era el... inocente, idiota, libre, alguien amado por todos y que pudo ser auténtico sin importar lo que viviera... pero yo, en cambio, viví tras su sombra sin poder sobresalir frente a los demás. Ya fuera en tiro con arco o algo tan vacío como "cazar faisanes", nadie podía compararse con él, ni siquiera yo, que pasaba horas y horas practicando, tanto que sentía que la piel de los dedos se me caería a pedazos... apenas durmiendo un par de horas por estudiar lo más posible, por ser alguien de quien madre y padre estuviera orgullosos, pero no, nunca fui como él.

Sí, todos tenemos elecciones difíciles, hacemos las que se creen convenientes en el momento, sin pensar si serán "buenas" o "malas", si tendrán alguna repercusión en el futuro, si te dejarán solo al final...
Sí, todos tenemos elecciones que cambian nuestra vida... pero tú... ¡maldición! Tú ¡¿por qué tenías que elegirlo a él?!

De entre todos los posibles, elegiste al único que te alejaría de mí, tú, que eras lo único que me quedaba en la vida... mi única familia...

Perdí a mis padres, perdí a mi hermana, mi secta, a ti... lo perdí todo y tuve que empezar desde cero, aun siendo comparado contigo sin importar cuanto me esforzara, sin importar cuánto quisiera ser yo mismo, siempre fuiste más que yo a ojos de todos... pero ¿que no merecía reconocimiento también?

Que cuando estuviste encerrado en aquella cueva, ¿no caminé por días y noches sólo para poder volver con ayuda por ti?

¿No te defendí una y otra vez? ¿No arriesgué mi integridad frente a mi madre para que te dejara tranquilo?