Created Beauty

Capítulo 13: " Vous êtes à moi"

Emma Woods

Hoy solo pude hacer las tareas de la mañana, debido a que me enfermé, no sé cómo o porqué, pero me dejaron en el hospital por unos días, aunque no es tan malo, solo que el olor de los medicamentos y la sangre son horribles, ¿qué acaso no saben que le harán saber a la gente que no saben limpiar bien?, pero bueno, ese asunto no me incumbe, así que tendré que aguantar un poco más...

En la tarde escuché a pacientes que gritaban, y cuando me asomaba  aver que pasaba, les habían quitado partes de su cuerpo, ahh, debe ser que les están amputando para que no se mueran, he escuchado sobre eso, pero no pensé que fuera tan doloroso,  incluso, creo que mi mente jamás se imaginó algo tan atroz.

En la noche casi que no me puedo dormir, las enfermeras van y vienen de cuidar a los pacientes que necesitan más cuidados, y honestamente me incomoda un poco, no esperaba que en casa de mi familia me pasara todo esto, pero para mi no es mucho problema, mientras pueda seguir respirando agradeceré mucho, Aesop y Joseph me visitaron apenas les mandaron una carta, me dieron el permiso de quedarme con mi familia hasta que me recupere totalmente, me sentí muy feliz por eso, amo mucho a mi familia, y a veces lo demuestro demasiado, menos mal ellos lo entienden.

A veces, me salía de mi habitación y jugaba con los niños ya que necesito entretenerme haciendo algo, y pensé que sería lindo que jugara con ellos, además les alegro el día de estar en una cama todo el día, porque ahora sé como se siente, y me hace feliz que ellos estén felices, me hacen sonreír y es como.... si me alegrara el alma para siempre, no sé si me hago entender bien, pero sé que estaré feliz aquí, mientras me recupero.

Joseph Desaulniers

Llegó el momento que esperaba, nos toca salir a comprar unas cosas y es momento de que acompañe a Aesop a ver que es lo que está pasando, no dejaré que vuelva a soltar lágrimas, ya sea que me las oculte o no, no dejaré que vuelva a pasar, Aesop estaba llendo por las cosas y yo me miraba en el espejo arreglándome una que otra cosa, siempre tengo que estar presentable a los demás condes, inferiores a mí.

Salimos y por el momento nada, todo estaba bien, pero al poco tiempo, empezaron las miradas hacia Aesop, los hombres, con la perversión tan grande que mi se molestan en ocultar, y las mujeres con una envidia, que apuesto a que se quemarían de solo ver, pero sé como callar todo eso, puse mi mano en su cintura, ese solo movimiento y empezar a mirar amenazante a la gente, fue todo lo que necesité para que ellos se alejaran de nosotros, además ayuda a mi reputación de que soy un demonio para ellos.

Aesop: Joseph, ¿está pasando algo?- apenas me volteó a ver, suavicé la mirada- la gente se está alejando.

Joseph: No sabría decirte que pasa amor, pero no importa- acaricié su mejilla para que no se preocupara, sé que salir lo tensa mucho- sigamos, ya después volveremos a la cama a dormir- y por el hecho de que tocó levantarnos a comprar y aún estamos cansados.

Y así fue todo el recorrido, el que llegaba a mirar a mi rosa, le mandaba una miraba y se iban corriendo, las mujeres se aterraban tanto que no se movían del susto, me encanta causar ese tipo de terror a la gente, además siempre les recuerda que soy superior a ellos, y como trabajo para el rey, saben de que soy capaz, aunque Aesop aún no lo sabe y me preocupa, ya que no quiero alejarlo de mi.

Al final, cuando regresamos a casa, escuché a Aesop suspirar del alivio, pobre de mi rosa, será mejor que siga saliendo con él por unos días, para que la gente se acostumbre a no verlo a la cara, es mío y deben obedecer mis reglas.

Aesop Carl

Me alegra de que no pasara nada raro como solía ser, me siento mejor y más calmado, además pude hacer las cosas normalmente bien, sin miradas feas ni ese sentir raro que tenía al salir, me siento muy aliviado, después de acomodar todo, subí a la habitación y me calmé totalmente, me volví a poner el camisón, por si acaso traje otro vaso de jugo, y me acosté, cuando Joseph vino se costó a mi lado y nos besamos, pero no pasamos de ahí, no es que no esté listo, simplemente no queremos que todo pase tan rápido, así que todo a su tiempo.

Aesop: Te amo- me escondí en su pecho mientras él acariciaba mi cabeza.

Joseph: También te amo- besó mi frente y empecé a quedarme dormido...

Hasta el próximo capítulo....