Escucho que alguien toca la puerta, trato de espabilar y me pongo de pie y abro sin preguntar quien es, al abrir veo Ryan
-¿Te quedaste dormida?- pregunta sonriendo, parpadeo sin entender hasta que lo veo arreglado
-¡Mierda! Ryan perdón tendremos que cancelar- pido con vergüenza
-No te preocupes esta bien- sonríe mientras asiente
-No, no esta bien, lo siento, es que...- me callo pensando si es buena idea contarle- discutí con Nicolás y Nick de nuevo- suspiro
-Ya veo- dice pensativo- ¿Que te parece una pizza y una pelicula?- propone y sonrió
-Eso suena genial- digo y lo dejo pasar- ¿De que quieres la pizza?- pregunto mientras marco el numero de la pizeria
-¿Italiana?- dice y yo asiento, llamo y la pido, veo mi notificaciones de mi telefono y en total son 64 llamadas perdidas de Nick y Nicolás, suspiro y lo vuelvo a apagar me siento alado de Ryan, escucho que el habla pero no le pongo atención
-Muñeca- dice mientras me mueve el brazo
-Lo siento, es que...- me callo- no te preocupes ¿que decías?- el me mira tratando de analizar
-Somo amigos, bueno me gustas pero ese no es el problema, el caso es que puedes hablar conmigo- propone y sonrió y asiento por que me siento a gusto con el, le cuento todo excepto la parte de haber tenido sexo por video llamada, el solo pone atención mientras asiente hasta que termino de contarle
-¿Que piensas?- pregunto
-Bueno...- se calla pensando- Que los abandones y te cases conmigo- dice y yo ruedo los ojos mientras sonrió- La verdad pienso que tienen razón en estar celosos, digo estas conmigo sola en paris, y ellos saben que me gustas, yo si fuera ellos también estaría celoso, pero no creo que estuvo bien que trataran de decirte zorra
-¿Entonces estoy mal yo?- pregunto y el niega
-Ellos estuvieron mal, te atacan entre dos y tu solo eres una, no suena justo la verdad, pero solo digo que entiendo por que están celosos- admite y yo asiento entendiendo, en ese momento escucho el timbre de la puerta, hago intento de pararme, pero el se para rápido
-Yo voy- pide y asiento escucho como abre la puerta y recibe la pizza, unos segundos después llega a mi lado con la pizza y el vino
-¿Señorita Moreti acaso quiere embriagarme?- pregunta mientras levanta el vino
-No puede haber pizza italiana sin vino tonto- digo y el asiente feliz, va por un sacacorchos y abre la botella, me levanto por dos copas y vuelvo con ellas, el sirve y empezamos a comer tranquilos en silencio, es un silencio cómodo
¿Y la pelicula?
La verdad ya no me interesaba ver una pelicula, estábamos cómodos así en silencio para nada incómodos, la pizza no es la mejor que he probado en mi vida pero tampoco es la peor y el vino ese es si esta bueno
ESTÁS LEYENDO
Amor de tres
RomanceDaniela es hija de un multimillonario, la gente espera cosas buenas de su parte, cosas grandes y que orgullescan a sus padres Pero las cosas se le salen de las manos cuando conoces a dos hermanos en un bar, que prometen corromper cada celula de su...