| "placentera sorpresa"

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El despertador sonó exactamente a las 07:00a.m. dándole la bienvenida al nuevo día. Bufó ante el sonido constante, tanteó la mesa de noche con la intención de apagar el aparato, lo logró cuando de un manotazo lo tiró al suelo. Se acurrucó en las frazadas cuando el sonido cesó.

Quería dormir hasta el mediodía pero sabía muy bien que su rutina a partir de ese día cambiaría. Abrió los ojos lentamente tratando de acostumbrarse a la poca luz del día que se colaba entre las cortinas del ventanal que daba al balcón de su departamento. Se frotó los ojos con ambas manos mientras despojaba su cuerpo de las calientes frazadas que habían tomado su calor en medio de la noche, se sentó en la punta de la cama mirando hacía un punto fijo tratando de indicar a su mente que era momento de empezar a moverse. Largó un bostezo y estiró su espalda haciendo que sus músculos se contraigan en el proceso.

Visualizó el despertador en el suelo y se encogió de hombros anotando mentalmente que pasaría por el centro y compraría otro. A pasos pesados arrastro sus pies, se metió al baño, la corta ducha hizó que levante energías para por fin empezar el día, cepilló sus dientes en frente del espejo; sonriendo al paso por ver la hilera blanca y reluciente, se peinó hacía un costado y afeitó la poca barba que tenía.

Salió del baño como nuevo, tomó la camisa y el traje que su hermana le había elegido para empezar en su empleo; camisa blanca y traje azul, la corbata se la debía al mundo, el no tenía idea como hacer el nudo.

Sastifecho salió del cuarto, se dirigió a la cocina y pusó el agua a calentar para preparar un té de menta, prendió la tostadora y metió pan en ella, acomodó la isla que se encontraba en medio de la cocina poniendo sobre ella el frasco de mermelada de frambuesa; que tanto le gustaba o más bien su hermana le había traído de un viaje y lo había obligado a probarla. Las tostadas estuvieron listas en unos minutos al igual que el agua cuando el pitido de la pava se lo indicó.  Tomó una taza de la alacena; soltó una risita cuando vió una foto sublimada de él y su hermana haciendo muecas graciosas, vertió el agua junto al séquito, tomó un paquetito de azúcar, removió con una cuchara pequeña el líquido y vertió la azúcar a su paso.

Se sentó en la isla y empezó a desayunar, untó la mermelada en una de las tostadas y tomó un sorbo del té, realmente debía agradecerle a su hermana por la mermelada, estaba deliciosa. Cinco mordiscos más y había terminado su té  al igual que las tostadas.

Pasó el saco que anteriormente había dejado en el espaldar de una silla, se fijó en un espejo de la sala si había alguna arruga en la vista, se acomodó el cuello de la camisa y tomó el maletín que descansaba en un sillón.

Con su mano libre tomó todo lo que había ocupado, dejó en el lavavajillas los utensilios para lavarlo después, suspiró tomando las llaves del coche y el departamento  que se encontraba en una mesita cercana a la mesa principal. Salió  al pasillo, saludó al vecino de alado y cerró la puerta.

El ascensor estaba ocupado y tuvo que bajar por las escaleras, saludó a todas las personas a su paso, salió al vestíbulo, hizó una pequeña reverencia al portero y luego salió del edificio buscando con la mirada a su auto. Ahí estaba, el pulcro BMW X6 Vantablack, estacionado en frente del edificio, fue uno de los tantos regalos que su padre le había dado por graduarse como psicólogo y profesor, corrió hasta el coche, abrió la puerta y la cerró de inmediato.

El frío se había colado por su ropa, realmente hacía frío, y por suerte un sobretodo se encontraba en los asientos traseros, se miró por última vez en el espejo retrovisor para acomodarse el cabello nuevamente. Introdujo la llave, la dió vuelta y aceleró.

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El autobús lo había dejado a una cuadra de la universidad, se fijo en el celular la hora "08:25a.m" en tan solo cinco minutos comenzaría su primera clase y claro que no quería quedar mal el primer día por una llegada tarde. Ajustó las correas de su mochila y empezó a correr, él sabía muy  bien que haciendo esa simple acción se veía como un completo idiota.

I found you-lsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora