¡ÉL o YO! (Minlix - Minsung - Jinlix)

18

¿Qué voy a hacer ahora? Esto no me lo perdonara, ¿Cómo pude ser tan imprudente?, camino por los alrededores de mi cuarto, me detengo viendo mi cuerpo desnudo frente al espejo, veo las marcas provocadas por ambos, cubro mi rostro con ambas manos mientras mis lagrimas caen, "no puedo perderlo, él es todo para mí" él no me lo va a quitar, debo hacer algo.

Busco en el armario algo que vestir, salgo del dormitorio, necesito hablar con él, llego a su puerta, toco pero no responde así que abro sin su permiso, lo veo recostado sobre la cama, me acerco a paso lento, sentándome en el borde de esta, lo quedo viendo, es tan hermoso, recordar que todos estos años intente que se fijara en mí, soportar que en cada fiesta seducía a más de uno, verlo en cerrarse en esos cuartos o yéndose con alguno del lugar, siempre sentía celos y dolor, me preguntaba siempre ¿Por qué yo no?

Cada día intentaba hacer algo para llamar su atención, así fue por años, aunque era protector conmigo y complacía cada uno de mis caprichos nunca se acercaba más de la cuenta, hace un año había tomado la decisión de alejarme, mirar a otro lado, comenzando a salir con chicos, pero ninguno me hacia feliz, ninguno me hacia olvidarlo, poco antes de las vacaciones, antes que llegara Felix, un día luego en una fiesta estaba con un chico, nos dirigimos aun cuarto, sentados sobre la cama nos estábamos besando, él me acariciaba, poco a poco él comenzaba a quitarme la ropa, pero justo en ese momento la puerta se abrió de golpe, un furioso Minho volteaba a vernos, podía ver su pecho subir y bajar con rapidez, tenía la mandíbula tensa, echaba fuego por los ojos, se acercó a paso rápido hacia nosotros, sostuvo mi muñeca y me aparto del chico junto a mí, este ultimo le iba a reprochar pero antes de decir algo Minho lo amenazo

-No te atrevas a tocar a mi chico, él es mío, te vuelvo a ver estar cerca de él destruiré a tu familia, sabes que puedo hacerlo

Luego de eso él me saco del lugar, nos fuimos a su casa y ahí fue mi primera vez, él a sido el primero en todo en mi vida, hasta mi primer beso se lo había dado a él, claro que él no lo sabía, se lo había pedido con el pretexto de que me enseñara a besar, pero la realidad es que siempre había anhelado sus besos, no sabía besar así que fue una buena excusa, al principio se había burlado de mi petición hasta que acepto, ese fue el comienzo de todo mi amor más profundo por él. Esa noche juntos me reclamo como suyo, dijo que me amaba y que no debía estar con nadie más, esa noche le pedí ser mi novio y dijo que sí, ahora puedo perderlo todo por lo que he luchado... una estupidez

Un sonido se escucha al interior del cuarto, busco con la mirada, es el móvil de Minho, eso me hace recordar ese video, cuando me aproximo para agarrarlo una mano me detiene de la muñeca, volteo a ver, Minho me mira serio, tiene el cabello algo desordenado

-No toques mis cosas – dice frio y cortante

-Está sonando, solo quería ver quien... - me interrumpe de golpe

-No toques mis cosas... nunca – siento mi cuerpo estremecer, un frio recorrer mi espalda, nunca me había hablado así

Él se coloca de pie, agarra el móvil y se va a una esquina, se escucha molesto y cortante, voltea a mirarme, cuelga, camina en dirección al armario, saca unas prendas para vestirse, tose, se ve decaído, lo veo tambalear un poco, creo que ha enfermado

-Estas enfermo – le menciono bajo – no debes salir

No me dice nada, se viste, su rostro esta rojo, creo que tiene fiebre porque puedo distinguir el sudor de su frente, me coloco de pie para ir hasta él, le sostengo del brazo, quiero retenerlo

-No debes salir... estas enfermo – niego a soltarlo, me preocupa, veo en su mirada tristeza

-Felix me necesita – me aparta para luego salir de la habitación

Maldita seas Felix... tú... siempre eres tú... no vas a quitármelo, él es mío, solo mío

Escucho la puerta de la casa cerrarse, luego el sonido del auto, miro por la ventana, se ha ido, apretó las maños en puños, no puedo dejar que él me lo quite, he luchado mucho por tener al amor de mi vida. Salgo del cuarto para ir a la sala, cojo el teléfono de la casa para llamar

-¿Hola? -se escucha una voz ahogada

-¿Qué hiciste imbécil? – le reprocho – Minho ha ido por Felix

-¿Y qué quieres... que haga? – se escucha descuidado su voz al hablar, esta ebrio – es tu maldita culpa

-No me vengas a culpar a mí, la culpa es de ambos... no seas imbécil Hyunjin – estoy molesto con este idiota – debes recuperar a Felix... no puedo perder a Minho

-Eso debiste pensarlo cuando me sedujiste en esa fiesta - espeta molesto – tampoco quiero perder a Felix – guarda silencio – fui una mierda con él... no va a perdonarme

-Debemos hacer algo... no podemos quedarnos con los brazos cruzados

-Vete a la mierda Jisung, tu maldito novio va a arruinarme... estas solo en esto, no vuelvas a llamarme – cuelga de golpe

Estoy frustrado, cuelgo el teléfono, miro por la ventana como la lluvia se hace mas fuerte, no deben estar juntos, no quiero, él no se lo merece, no ha hecho nada por él. Mis lagrimas comienzan a fluir, me tiro al sofá entre lágrimas, rabia e impotencia, ¿Cómo are para recuperar la confianza de Minho? Él debe amarme aun ¿verdad? Si no fuera así me hubiera arrojado a la calle... tengo esperanza ¡sí! Seco mis lagrimas para ir a la cocina, voy a reconquistar a mi novio, sé todo de él, voy a esperarlo con una cena deliciosa. Ha pasado un tiempo y aun no llega, me preocupa, ¿no piensa volver?, me siento a esperar sentado en la sala, el cielo esta gris, triste como mi corazón, escucho el motor de un auto, estoy ansioso, poso mi mirada en dirección a la entrada de la sala de estar, la puerta se abre, escucho pasos lentos, mi corazón se agita, los veo, están parados frente a mí ¿Le abra contado lo que sucedió con Hyunjin?, la mirada de Minho es frio como el hielo, tiene abrazado por los hombros a Felix, mientras este esta con la cabeza baja, esta mirando hacia el suelo, ambos están muy empapados

-Hice la cena – menciono mientras me coloco de pie para acercarme

-¡Gracias!... pero no tengo apetito – dice bajo Felix

-Puedes comer – atrae aun más cerca a mi hermano en sus brazos – llevare a Felix a su cuarto a instalarse

-¿Vas a comer? puedo esperar - digo con prisa

ellos comienzan a caminar en dirección a las escaleras

-No tengo ganas – veo su mandíbula tensarse, veo que intenta controlarse

Los veo subir, no puedo apartar la mirada de ambos, entran en el cuarto de Felix, cierran la puerta, ya no escucho nada. Quiero gritar, quiero romper todo, quiero entrar a ese cuarto he impedir que estén juntos

No puedes quitármelo Felix... Minho es mío, solo mío...