La fuerza de la lluvia en aquella noche no era lo suficientemente agresiva para callar el eco de los sollozos que salían de sus labios, ver las gotas resbalar por la ventana reflejaban sus lagrimas cayendo por sus mejillas, los rayos daban la impresión de romper el cielo asemejándose a las grietas que en ese momento estaban formándose en su corazón.
¿Cómo la mejor noche de su vida podría convertirse en la peor, así sin ningún aviso?
Sus recuerdos, los abrazos, los besos, las promesas y palabras dichas horas antes ahora se veían amenazadas por un trágico accidente que termino destruyendo toda su celebración. Eran ya cuatro años de relación, los más felices para ambos chicos, tenerse era un motivo suficiente para hacer que una sonrisa siempre se quedara marcada en sus labios, recordar cuanto lo amaba hacía que unos extraños nervios recorrieran todo su cuerpo como si fuera la primera vez.
Su relación no podía definirse como perfecta, ninguna relación lo es, pero se caracterizaba por la confianza que existía en ambos, la facilidad para resolver cualquier malentendido sin tener que lastimarse, se dedicaban momentos uno al otro gracias a esos deseos de querer estar cerca a cada pequeño segundo y los demás solo podían quedarse a admirar la pureza en los sentimientos de sus corazones formando la más hermosa relación.
Pero la felicidad no es redonda y ahora Win podía confirmarlo, siempre había algo que la arruinaba, que llegaba a cambiar todas sus expectativas y sueños en tan solo segundos, que llegaba a destruir ese futuro con el cual soñaba o simplemente a destruir su corazón.
Esa tarde regresaban a cada después de haber disfrutado días enteros juntos, en medio del bosque dentro de una cabaña rodeada por árboles y flores de colores las cuales nunca antes se habían visto, un lago había a una distancia prudente de la cabaña y junto a ella una piscina donde cabían dos personas a la perfección. El canto de los pájaros se escuchaba durante las mañanas, el choque de las hojas entre sí formando una melodía única y ni hablar de la tranquilidad que traía la brisa fresca que golpeaba sus mejillas.
Ese lugar era mágico no solo por su pureza, si no también por la persona con quien estaba compartiendo esa experiencia, risas a cada segundo, abrazos espontáneos y besos que marcaban cada rincón de su piel en un acto de amor que buscarían guardar por el resto de sus días, todo era felicidad, pero ahora su corazón se sentía engañado por las propias ilusiones.
Se encontraba dentro de un hospital, apegado a la pared blanca y opaca que lo hacía estremecerse ante sus pocas esperanzas, frente a él estaba la puerta que daba a la sala de urgencias tentándolo a entrar, pero al mismo tiempo reteniéndolo por el miedo a encontrar algo que no quería, esperaba una noticia que tranquilizara su corazón, pero el tiempo pasaba con lentitud y su miedo crecía cada vez más.
La noche escondía los más profundos secretos, así cómo también le daba las peores pesadillas, un accidente de tránsito fue lo que menos se imagino que tendrían al momento de regresar a casa. Durante el viaje Bright llevaba una velocidad prudente para que nada pudiera sorprenderlos sin embargo un joven en estado de embriagues estallo su auto contra el de ellos, el estruendo fue demasiado fuerte que incluso casas cercanas a la carretera alcanzaron a escucharlo.
De inmediato corrieron para ayudarlos mientras llamaban a la ambulancia para que los atendiera, escuchaba como las personas murmuraban diciendo que el chico del carro contrario había tenido la culpa, pero a él lo único que le interesaba era que Bright reaccionara.
Para protegerlo de los golpes, apego su cuerpo al de él cuidando que ni siquiera un vidrio pequeño fuera a raspar su cuerpo, lo que hizo aun más complicada su condición, al sentir que el choque se había detenido giro su cuerpo observando a su novio con los ojos cerrados, la respiración lenta y escasa, los labios sangrando al igual que su frente y en un estado de inconciencia que causo el temor en su corazón.
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La Foto de Carnet│BrightWin (En edición)
FanfictionFracción 1: Rompe las reglas por mi, como lo has hecho siempre y por favor quédate a mi lado, no puedo ser fuerte si no estas conmigo, no quiero que mi única luz llegue a apagarse y quedarme agonizando en esta oscura vida la que no deseo vivir si no...