Minnie, un chico dulce y amigable que con solo verlo causa ternura de quienes lo rodean.
Por otro lado, tenemos a Min YoonGi, un chico amargado y aislado de la sociedad desde que tuvo un accidente que lo dejó discapacitado.
¿Podrá ese pequeño enam...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El castañito aún yacía dormido debido a la anestesia que invadió su pequeño cuerpo, solo tenían que esperar a que despierte y claro, eso llevaría horas. La habitación clínica que fue preparada para él, se veía extremadamente acogedora. Taehyung ahora lo único que quería era que su hermano despierte de ese profundo sueño. El doctor mencionó y recalcó que posiblemente despierte en una hora o quizá más, todo depende del organismo del menor.
ㅡMi gatito sigue dormido ㅡespetó desilusionado.
La demora lo ponía muy ansioso. Esperó muchas horas en la sala de espera, incluso en varias ocasiones se le adormeció el traserito por quedarse sentado muchas horas en un asiento incómodo.
ㅡHay que ser pacientes, Minnie. Pronto despertará ㅡacarició suavemente sus cabellos alborotados.
ㅡ¿Puedo quedarme aquí? ㅡpreguntó amablementeㅡ. Quiero ser lo primero que vea cuando despierte ㅡcon sus manitos gorditas hizo un gesto de súplica para que Taehyung le diera permiso.
ㅡEstá bien, Minnie ㅡaccedió. No podía negarse ante tan dulce peticiónㅡ. Iré hablar con el doctor Park, ¿Sí? ㅡespetó dirigiéndose a la salida, no sin antes observar una vez más a su hermanito dormido.
Taehyung no tenía palabras para expresar el agradecimiento que sentía por Minnie, ese pequeño lleno de alegría y entusiasmo hizo que su hermanito viera la vida de diferente manera. Cuando el mayor dejó la habitación clínica, Minnie se puso manos a la obra, cuidaría de su gatito como es debido.
De una pequeña mochila que traía consigo, sacó un par de sabanas, unas almohadas extras, unos hermosos gorritos con formitas y medias con diseño para que esté siempre calientito. El invierno en Seúl es una de las estaciones más fuerte durante el año, ya que en muchas ocasiones la temperatura no asciende, por lo que debía procurar mantener caliente a su castañito.
ㅡ¿Minnie? ㅡaquella voz lo tomó por sorpresa. Cuando se percató quien era, escondió todo lo que tenía en la mano de un solo momento audazㅡ. ¿Qué escondes?
Jungkook entró al lugar cerrando la puerta a su paso. Podía ver exactamente unas sábanas, almohadas, gorros y medias sobresaliendo de su pequeño cuerpecito, en un intento de esconder todo, falló evidenciando su acto.
ㅡNo escondo nada ㅡmostró una sonrisa sospechosa.
ㅡEspera. Eso que tienes ahí se parecen a las medias nuevas que compré la semana pasada ㅡrealmente tenían un parentesco enorme, es más, hasta el diseño era el mismo.
ㅡClaro que no ㅡfingió no saber a qué se refería su hermanoㅡ. No son las medias nuevas que encontré en tu armario hoy en la mañana ㅡespetó Minnie abrazando la pequeña mochila para que no revisara nada.
ㅡSabes que no me gusta que agarren mis cosas sin permiso ㅡJungkook podía ser muy compresivo con su hermanito en muchas cosas, pero había algo que de cierta manera lo hacía enojar, era que tomarán sus pertenencias sin su consentimiento.