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No quiero levantarme, es realmente cómodo aquí sobre todo porque incluso si la habitación ni siquiera tiene colores cálidos o decoraciones que puedan reflejar tranquilidad se siente una comodidad extraña.

Cómo si estuviera en mi propia habitación ahora.

Suspiro hundiéndome todavía más bajo las gruesas sábanas de la cama de Namjoon, muerdo el interior de mi mejilla girando un poco el rostro para poder sentir su perfume en ellas antes de cubrirme hasta la cabeza suspirando.

Escucho movimiento en la cocina, sartenes y cucharas, supongo que él está preparando su desayuno, mi sueño es ligero, así que lo sentí despertarse no hace mucho rato, probablemente me observó unos cuantos segundos antes de levantarse, porque sentí su mirada, y luego de ir al baño salió de la habitación.

Me quedo por unos segundos tratando de asimilar lo que hice anoche, el hecho de estar aquí en lugar de estar huyendo de esta "relación" o como vayamos a llamarlo a partir de ahora. Lo interesante es el hecho de que estoy asustada, pero no estoy huyendo.

Muerdo el interior de mi mejilla suspirando antes de girar bajo las sábanas, abrazo una almohada subiendo una de mis piernas en esta y luego suspiro nuevamente, segundos después doy otra vuelta y tal vez dos mas antes de que su risa llene la habitación, mi piel se eriza mientras retiro las sabanas y lo veo apoyado en el marco de la puerta.

- No vas a levantarte Kang? Es tarde para ti.

- Qué hora es?.... No puedo quedarme aqui?

- Las once y podrías, pero recuerdo que tienes una mascota ¿no?

- Nabi lo tiene, mi vecina, se adueñó de él mientras estuve en Ilsan así que eso es tu culpa - sus comisuras se alzan mientras se acerca, se sienta al borde de la cama dejando su espalda contra el respaldo y alzo la cabeza sosteniéndola en mi mano alzada mientras apoyo el codo en la almohada.

- Podías llevarlo contigo, yo ni siquiera sabía de su existencia.

- Que Jack no te escuche decir eso porque te orina y no querrás que eso suceda - se ríe y una de sus manos se acerca a mi cabello, empujandolo detrás de mi oreja despejando mi cara.

- Igual levántate, hay que desayunar - no respondo frunciendo los labios antes de en volverme en las sábanas nuevamente.

- En realidad tengo que ir a mi departamento a ducharme y cambiarme - murmuro.

- Puedes hacer eso aquí - dice empujando las sábanas hasta que puede verme.

- Ajá.... y me pongo lo mismo?

- Mi armario está a tu disposición, en caso de que quieras vestirte claro - alzo las cejas sacudiendo la cabeza.

- No voy a andar desnuda aquí y dudo que tengas ropa interior para mí.

- Mmm... eso te lo debo para la próxima - dice, paseando sus dedos por mi frente empujando los mechones lejos de mi rostro.

- Qué?... Vas a hacer esta cosa cursi de comprar ropa interior para mí?

- Es un trato justo si luego puedo quitarla - resoplo escondiéndome bajo las sábanas nuevamente.

- Pero si soy yo misma quien se desnuda.. Kim.

- Igual salgo ganando - se ríe desde el pasillo, muerdo mi labio inferior sentándome en la cama - No te quedes ahí!

- Ya estoy de pie!...Que exigente - mascullo encaminandome al baño.

Me toma unos minutos maniobrar para lavarme los dientes,

Hago de mi cabello un moño alto mal ajustado y luego paseo mis manos por mi cara evaluando mi rostro hinchado en el espejo frente a mí, frunzo los labios con disgusto.

𝙇𝘼 𝙋𝙍𝙊𝙋𝙐𝙀𝙎𝙏𝘼 (+18) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora