Blurry Eyes | Dahmo

Piloto - Chapter I: "Kim Dahyun And..."

Eran las siete de la mañana cuando sonó el despertador del teléfono de Dahyun, a la cuál no le costó despertar, puesto que ya contaba con una rutina fija.

Era lunes, específicamente el primer día del semestre. Y aunque apenas empezaba el día, la coreana ya estaba muy ansiosa, puesto que ese mismo día, se cumplían exactamente ocho meses desde que había aceptado ser la novia de Chang Eun-Woo, al que había visto apenas unos días, a pesar de ser vacaciones.

Un chico realmente lindo y agradable, al igual que muy respetuoso y atento. Ya hacía casi dos años que se conocían, y habían empezado con una gran amistad, hasta que ambos se dieron cuenta de que había sentimientos más allá, y por su puesto en poco tiempo comenzaron una relación, que hasta ahora, todo iba muy bien.

Ambos conocían sus límites, y apreciaban la confianza que tenían uno en el otro, por lo cual casi nunca peleaban, y cuando lo hacían, intentaban resolverlo de la mejor manera, teniendo como base la comunicación.

Al levantarse de la cama, Dahyun pensó en lo importante que era el día, en lo alegre y especial que podría ser. Se sentía plena y tranquila.

Sin más, comenzó a alistarse para salir pronto de casa, se puso su uniforme y se apresuró para llegar a sus clases a tiempo. Y la verdad sí, estaba emocionada por ver a Eun-Woo. Tenía una linda pulsera para él, que aunque era un regalo pequeño, ambos iban a valorarlo y a apreciarlo cómo si valiera millones, puesto que a la pareja no le importaban los costos de sus detalles, sino, sus significados.

En menos de una hora se puso en marcha, la escuela no quedaba lejos así que ella simplemente tomaba su bicicleta y rápidamente llegaba, aunque con mucha tranquilidad. Siempre apreciaba el buen paisaje mientras viajaba a aquella institución.

Al llegar, la coreana acomodó su bicicleta en el estacionamiento y le puso el candado de todos los días, pero pronto fue sorprendida cuando alguien cubrió sus ojos. Ella simplemente rió.

—Ya sé que eres tú, Eun-Woo —dijo sonriendo, rápidamente se dio la vuelta para mirar a su novio con una rosa entre sus dientes perfectos y blanquecinos, que la veía fijamente a los ojos con una mirada muy tierna y amorosa—. Vaya, Romeo, que linda rosa... -murmuró mientras le quitaba la flor de entre sus dientes.

—Es para una chica igual de hermosa —musitó el muchacho para después regalarle una sonrisa—. Felices ocho meses, Kim Dahyun.

—Felices ocho meses para ti también, cariño —dijo la menor y se acercó para besar los labios de su novio suavemente, siendo correspondida al instante.

Al besarlo sintió cómo en su estómago habitaban las típicas "mariposas", se sentía feliz, y muy afortunada, puesto que ya casi no había chicos cómo el suyo, y deseaba que su relación fuera muy duradera, porque realmente lo quería.

La romántica escena fue interrumpida por una chica que llevaba muchísima prisa, y que había tropezado justo a lado de ellos.

—¡Ouch! —Se quejó ella al caer.

Al escuchar aquel quejido, ambos se acercaron a ayudar a esa pobre chica.

—Dios mío, ¿te encuentras bien? —preguntó Dahyun preocupada.

—¿Necesitas algo? —La siguió Eun-Woo.

Dahyun la miró, tenía el cabello de color negro, con un flequillo que estaba ligeramente despeinado por su caída. Cejas prominentes. Una nariz pequeña y labios color carmesí, que estaban ligeramente secos. Y sus ojos, eran de un color café, casi como el chocolate que la hacían divagar.

También vestía el uniforme de la escuela femenino, al igual que ella, que consistía en una falda color gris claro en conjunto con un saco del mismo color, y una camisa blanca de manga larga que se abotonaba por el centro. El uniforme masculino consistía básicamente en lo mismo, sólo que ellos portaban pantalón.