Leyendo: La Verdad Sale A La Luz

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Orión y Walburga Black, se congelaron en su sitio, el muchacho decía ser descendiente de su querido tío, sus padres se pondrán felices al saber que su hermano siguió su vida y fue feliz.

Andrómeda y Narcissa, no sabían cómo reaccionar, sabían la historia de Marius Black, el único Squib de su familia, ambas pensaron que debido a que su descendencia se unió a otra de sangre Squib, el gen mágico volvió a activarse. Pero a ninguna de las dos, le interesaba.

Bellatrix estaba furiosa, como osaba ese sangre sucia a mancillar el nombre de su familia, y para el colmo, decir ser descendiente de la mayor decepción de Noble y Ancestral Casa Black.

Rigel y Sirius se vieron unos momentos, recordaban una de sus preciadas pláticas con su padre y abuelo, sobre como extrañaban a su hermano y que le hubiese gustado conocer a su tío, mientras ellos escuchaban las maravillas -junto a su padre- de Marius Black.

Andrew Travers Gamp, junto a su prima Frida II Rowle Gamp, observaban con anhelo al chico, talvez podrían hablar con él, para reconectar a su abuelo con su pequeña hermana. Ambos primos se miraron, y se abrazaron con alegría, su familia estaría unida otra vez.

– ¿Único descendiente mágico? – pregunto Andrew –

– El bisabuelo Marius y la bisabuela Frida se casaron con muggles, sus hijas, mis abuelas, son mestizas Squib, que igual se casaron con muggles, mi padre es nieto del abuelo Marius, mi madre es nieta de la abuela Frida, se conocieron, se enamoraron, se casaron y salí yo – dijo el castaño como si nada –

– Que gran resumen – comento con gracia Barty a sus amigos, quienes negaron divertidos –

– ¿Qué paso con el título? – cuestiono curiosa Frida, pues su madre y su tía no lo pudieron heredar, mucho menos ella, y su primo está en duda, pues desde el destierro de su tía abuela, la magia familiar ha estado muy tosca con sus bisabuelos, los antiguos jefes de familia, y desde que su abuelo Gilbert, tomo el mando, la magia se está estableciendo, la familia supone que por que está buscando a su hermana –

– Según me dijeron en Gringotts, después del fallecimiento de Lord Gilbert, su esposa tuvo que dimitir de ser la Lady, el anillo la estaba matando – dijo seriamente – nadie de la familia sanguínea pudo acceder al título, la magia familiar no los dejaba, las únicas que podían acceder a lagunas bóvedas y poder administrar el legado familiar, eran las hijas de Lord Gilbert, pues ayudaron de todo corazón a su padre en su búsqueda por el anhelo de conocer a su tía – agrego Hermes con una leve sonrisa – ¿alguna pregunta? –

Lord y Lady Black, alzaron las manos; sorprendiendo a la mayoría – joven, mi esposa y yo quisiéramos dialogar con usted, el algún tiempo libre que tengamos – hablo primero Orión –

– Si está usted de acuerdo – agrego Walburga calmadamente, esto asombro a sus hijos y sobrinas, y todo aquel que la conociera, pues estaba siendo educada con un "sangre sucia" –

– ¡¿De verdad creerán esta estupidez?! ¡Este ser inmundo solo está diciendo falacias, maldita sea! ¡Está ensuciando el honor de la Noble y Ancestral Casa Black! ¡¿ACASO NO LO VEN?! – grito fúrica Bellatrix sin poder evitarlo, olvidándose de a quienes se dirigía –

Andrómeda, Narcissa, Rigel y Sirius quedaron de piedra, con los ojos como platos, ante tal falta cometida por Bellatrix, todos los sangre pura (y mestizos que sabían del tema) estaban expectantes, incluso con ansias, en espera del castigo a la Black.

Bellatrix tarde se dio cuenta de lo que había hecho, abrió los ojos temerosa de las consecuencias de su acto, quiso excusarse, pero se quedó quieta y muy callada ante la fría mirada de su tía, se quedó en una posición de sumisión bajo la mirada oscura de su tía, quien no expresaba absolutamente nada, poniéndola de los nervios.