Gobernantes

CAPITULO 1.

                               Lexi.

Normal...

Así definiría mi vida ahora mismo...

Con mi rutina marcada.

Mis mismos errores de siempre.

Mis mismos amigos.

Incluso mi novio.

Dany.

Llevamos 3 años juntos.

Y aún teniéndolo todo siento que me falta algo...

No sé que me falta pero algo que he pasado desapercibido seguro puesto que llevo con está sensación prácticamente desde que nací.

Es como un constante vacío en el pecho.

Que aún con todo lo que he ido consiguiendo no he sido capaz de llenarlo.

Con esta sensación me encuentro ahora mismo, rodeada de gente extraña en una casa realmente extraña para mí puesto que nunca había ido a casa de mi mejor amigo.

Kevin.

Tiene una casa realmente preciosa con un jardín inmenso, una piscina hermosa en la que se encuentra bañando todo el mundo y dos plantas con escaleras mecánicas para subir y bajar.

-Lexi, ¿Estás bien?- Se encuentra preguntándome Dany.

-Sí, solo estaba pensando...

-¿En qué pensabas?

-Nada... Tonterías mías.

-¿Seguro?

-Sí- Le aseguro.

Con eso me echa un último vistazo antes de girarse nuevamente hacía nuestros amigos y poder seguir con la conversación que está teniendo lugar ahora mismo sobre coches y cual es el mejor.

Pero yo me estoy distrayendo un momento al ser consciente de que alguien me está observando desde las sombras y en un intento de observar de quién se  puede  tratar esta sensación a desaparecido...

Tanto así que dejo de darle importancia en lo que queda de tarde.

Y así pasamos la tarde-noche en esta casa...

Con estas personas tan extrañas y a la vez tan cálidas...

Disfrutando de la última fiesta de verano puesto que mañana empezamos las clases.

Y aunque físicamente esté aquí metida en está fría piscina está vez mi mente está volando...

A otras escenas...

A otros tiempos...

A otras historias.

En un abrir y cerrar de ojos son las 6 a.m cuando llego a mi casa con cuidado de no hacer ruido para no molestar a nadie hasta meterme en la habitación para ver si puedo dormir un poco.

Ya que mañana me espera un día muy largo...

Al cabo de dormir un poco escucho un ruido que intento ignorar.

Al ignorarlo escucho el mismo ruido.

Y lo sigo escuchando una y otra vez hasta que por fin logró despertarme del todo y ver que está pasando.

Al despertarme a ver que está pasando solo puedo ver una sombra que se encuentra pasando de un lado a otro de la habitación...

En lo único en que soy capaz de pensar al observarla es que es enorme y a la vez cautivadora.

Muy cautivadora...

Tan cautivadora que no sé cómo me encuentro siguiéndola.

Y al seguirla me doy cuenta de que me está llevando a un lugar maravilloso.

Lleno de árboles por todas partes y flores preciosas...

Y de repente me parece tan maravilloso este lugar que me quedo sin voz durante unos instantes...

Porque al ver algo tan maravilloso, la voz humana no sabe qué decir ni siquiera sabe qué hacer y mucho menos si debería ignorarlo o no.