Gusu

Capítulo cinco

Lan Wangji se encontraba en su oficina examinando las ventas de la actual colección, también estaba en charlas con inversionistas. De pronto, fue interrumpido por una llamada por parte de su hermano, la voz del mayor se escuchaba distinta, lo que el segundo jade supuso que algo extraño sucedía.

Pospuso su trabajo y fue hacia Gusu, en donde está la casa de su tío. Una vez llegando ahí, vio a su hermano mayor, JingYi y Lan Qiren reunidos en una habitación.

—¿Ocurre algo, tío?-

Dijo Lan Wangji tomando asiento en un sofá, una de las mucamas le entregó una taza de té.

—Hemos recibido una llamada por parte de un hombre quien vive a las afueras de la ciudad. Está preocupado debido a que los pueblos vecinos han sufrido de varios ataques extraños. Ellos viven en una zona donde únicamente vive gente marginada y pobre. Uno de esos pueblos, de la noche a la mañana perdieron la mayoría de sus habitantes y el pueblo vecino experimentó lo mismo. Ahora, el único pueblo restante está alarmado. Tienen la sospecha de un grupo de hombres, los causantes los describen como cadáveres. Un hecho terrible que debe ser examinado a profundidad, estamos a pocos días o quizás horas a que exterminen el pueblo restante. -

Todos se miraban sorprendidos, hace tiempo que no sucedía un evento de esa magnitud. Luego su tío continuó.

—Es extraño que haya sucedido de la noche a la mañana. Ellos pidieron ayuda al gobierno, pero al no tener respuesta, fueron con los demás clanes, sin embargo, los ignoraron. Ahora es nuestro turno ayudarlos. –

Dijo Lan Qiren luciendo serio y recto.

—No te preocupes shufu, yo me encargaré de investigar en estos días. Llevaré conmigo a JingYi y a los discípulos. -

Respondió Lan Wangji de manera decidía mientras saboreaba el té verde. Al escuchar su respuesta, su tío asintió con la cabeza, era lo que deseaba escuchar por parte de su sobrino.

Más tarde, como siempre, Lan Wangji llegó tarde a casa.

Mo Xuanyu había tomado un baño para ponerse su pijama y cuando estaba a punto de dormir, escuchó un ruido. Lan Wangji había llegado, así que cerró sus ojos y estuvo esperando a que el mayor entrara a la cama.

Pasaron varios minutos y no había rastro del mayor, así que se puso de pie para ir a la sala despacio, intentando no hacer ruido. Lo que encontró, fue a su esposo que hablaba por telefono con alguien.

El segundo jade se miraba cansado y un poco molesto, así que el chico se quedó escuchando la conversación.

—Lo siento Wangji, pero no ha resultado lo del retrato. Creo que tienes que buscar otras formas. –

Al parecer estaba hablando con su hermano.

—Mn.. Debemos usar las redes sociales y la televisión para buscarlo. No creo que se lo haya tragado la tierra, debe estar por ahí. -

Lan Wanji se quitó el saco elegante que llevaba puesto y lo dejó sobre el sillón, tomó asiento un tanto frustrado y acariciaba a uno de los conejitos para quitarse el estrés.

—Pero el retrato hablado no funcionó ni tenemos imágenes de él. No creo que funcione por medio de las redes sociales, él era pequeño y no teníamos los medios suficientes para... -

Lan Xichen volvió hablar pero fue interrumpido por Lan Zhan.

—¡No voy a parar! -

Lan Zhan se sentía desesperado, ha pasado tantos años buscando a su hijo y al no tener respuestas, estaba perdiendo la cordura.

—Un chico de ojos grises, casi nadie tiene ojos grises como... -

El segundo jade se detuvo para recordar los ojos de Wei Ying y suspiró.