El niño hada olvidado

Capítulo 10: Spar a la luz de la luna

N/A: ¡Gracias a Quathis por el título del capítulo!

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Spar a la luz de la luna

La luna llena era visible entre los pequeños espacios en el dosel de la jungla, brillando plateada y brillante junto con las muchas estrellas titilantes en el cielo nocturno. La noche no era quieta ni tranquila. Muchos animales cazaban en la oscuridad, miles de insectos cantaban y chirriaban, y un grupo de magos se retorcía, gemía, lloraba y gemía de un dolor terrible.

"En serio... ¿cómo no estás en una terrible agonía como todos los demás?" Ultear le preguntó a Erza con incredulidad.

Erza lucía una sonrisa de suficiencia mientras estaba de pie bajo la tenue luz de una lámpara de aceite que colgaba del gancho montado al lado de la puerta cerrada de una cabaña de madera con la que el grupo había tropezado y ahora estaba 'tomando prestada'. Detrás de la puerta estaban sus compañeros de gremio, cada uno soportando un dolor intenso e insoportable causado por las runas mágicas que adornaban su piel. Las runas ardían como lava fundida y también se sentían así; abrasador e insoportable. Fue el poderoso hechizo de Ultear el que sacó a relucir el verdadero potencial de cada mago, lo que les permitió maximizar aún más sus habilidades mágicas a un nivel sustancial para darle a Fairy Tail la ventaja que necesitaban para competir en los Grandes Juegos Mágicos.

No todos estaban detrás de la puerta, rodando, arañando y retorciéndose en el suelo. Jet y Droy se habían puesto pálidos y cobardes cuando presenciaron por primera vez el efecto del hechizo Arco del Tiempo de Ultear en Natsu. Los hombres se habían quedado atrás para vigilar a Bacon cuando todos los demás, incluido el joven Romeo, reunieron el poco coraje que tenían para continuar con el tortuoso proceso.

" Hazlo por el bien de Fairy Tail, para recuperar nuestro orgullo y reputación. Durante siete años perdimos en los juegos, sintiendo nada más que vergüenza y derrota total. ¡Esta es nuestra oportunidad de mostrarle a Fiore que no nos hemos rendido! " Romeo había alentado a todos cuando algunos dudaron en dar un paso adelante. El niño fue el segundo en ofrecerse como voluntario, decidido a hacerse más fuerte y con la esperanza de lograr una nueva fuerza como su modelo a seguir. Después de su valiente exhibición, los demás lo habían seguido inmediatamente.

El efecto del hechizo difería en Erza en comparación con los demás. Para ella se sintió como nada más que pinchazos calientes que duraron menos de media hora, provocando una mirada perpleja de Ultear.

"Lo resistí", Erza decidió responder.

Ultear todavía no podía creer lo otro. Junto a ella estaban Jellal y Meredy, ambos subiéndose las capuchas y listos para partir.

"No podemos permanecer en un lugar por mucho tiempo", informó el hombre. Erza asintió comprendiendo, captando su pequeña sonrisa en la oscuridad mientras miraba por encima del hombro. "Espero verte de nuevo, Erza."

"No olvides enviarnos cualquier información sobre esa fuerza misteriosa en los Juegos", recordó Meredy mientras felizmente se despedía con la mano.

"Todos deberían sentirse bien antes de que comiencen los Juegos. Con suerte", dijo Ultear mientras también se subía la capucha. "Les deseo la mejor de las suertes. Y por favor, cuiden de Gray".

Erza asintió una vez más y les dio un saludo final y una sonrisa determinada. Observó cómo sus capas oscuras se fusionaban con las sombras, escuchando solo sus voces desvaneciéndose mientras charlaban libremente entre ellos como un grupo de buenos amigos.

Erza estaba feliz de ver cuánto habían cambiado para mejor los tres. Eran Crime Sorcière, un gremio no oficial e independiente cuyo objetivo era poner fin definitivamente a todo el mal del mundo provocado por los Dark Guilds y el infame Black Wizard, Zeref. Muchos Dark Guilds habían sido eliminados por los tres miembros en los últimos siete años. Fue una hazaña verdaderamente asombrosa.