𝐂𝐨𝐮𝐧𝐭𝐢𝐧𝐠 𝐒𝐭𝐚𝐫𝐬 ||Tristán Dugray

6

Me levanté y fui a ver a Rory quien estaba sentada en su cama, leyendo.

- Leyendo tan temprano? -pregunte.

- Es que hoy no tengo mucho que hacer. Tú que haces despierta?

- Tengo clase de natación. Ayer di la primera. Por cierto ¿Como te fue con el abuelo? -dije sentándome.

- Muy bien. Me divertí. Mamá estaba sorprendida cuando le conté. -dijo mientras cerraba el libro.

- Me alegra, muy bien, ya me tengo que cambiar. Si mamá se levanta le dices que salí a mis clases.

Rory asintió.

[...]

Llegue y luego de ejercicio de calentamiento nos metimos a nadar.

Era divertido todo hasta que vi que Tristán llegaba.

- Buen día, profesor. Disculpe la tardanza. -saludo al profesor.

El profesor dejó que entre y yo lo mire confundida. ¿No se supone que su clase es luego de ésta?

- Que haces acá? No se supone que tu clase es en dos horas? -pregunte.

- Si, pero decidí cambiar el horario. -dijo y el profesor interrumpió.

- Bien. Comiencen nadando en braza. 10 veces, en orden. -dijo el profesor.

Primero iba una chica, luego yo y al último Tristán.

[...]

Luego de la clase me fui a cambiar y cuando salí vi a Tristán quien estaba afuera.

- Por fin sales. Te estaba esperando. -dijo mientras estaba recostado en el muro.

- ¿Y por qué me tendrías que esperar? No te pedí que lo hagas. -dije acomodando mi bolsa donde llevaba mis cosas.

- Sé que irás a lacrosse y como yo también no veo el problema de ir juntos. -dijo completamente tranquilo.

- Bueno, vamos. -dije y asintió.

[...]

Llegamos a la cancha de lacrosse y me fui al vestuario, abrí mi locker, guardé mis cosas y saqué el casco, los guantes y el palo.

- Alissa? -reconocí la voz apenas la escuché, es Hayley.

- Hola. -sonreí.

- No sabía que estabas en lacrosse. -dijo también con una sonrisa.

- Me llama la atención está clase de deporte, es eso. -dije mientras ponía candado.

- A mi en lo personal no me gusta tantoo, pero lo aguanto porque es el único deporte en el que puedo golpear a alguien. -dijo con humor la última oración.

Reí un poco ante eso.

- Tienes una sonrisa muy linda. -dijo Hayley logrando que me sonroje.

- Gracias... -fui interrumpida por el entrenador.

- Bien, voy a llamar por lista a dos chicos y van a venir. -dijo el entrenador... ¿Jared? - Leonardo Wheeler y... Tristán Dugray.

Ambos fueron y recordé a Leonardo, me cayó muy bien.

Me miró una sonrisa amable y le devolví el gesto.

El entrenador dijo que cada uno de ellos iba a elegir a los que jugarían, para ver como se desenvuelven.

- Vas tú, Wheeler. -dijo el entrenador.

- Alissa. -dijo rápidamente.

Asentí y fue hacia Leonardo.

- Sabes jugar verdad? -dijo Leonardo susurrandome.

- No, está es la primera vez que juego esto. -dije manteniendo el contacto visual con él.

- Mierda. Ya veremos cómo hacemos igual. -dijo mientras cortaba el contacto visual.

- Enséñame. -dije sonriendo.

- Ya, pon fecha y hora y estoy. -dijo siguiendo el juego.

Nos alistamos y comenzamos a salir pero de cada uno, me tocaba a mi con uno más que sería el portero, yo tendría que proteger que Hayley no haga un tiro a gol, bueno, eso entendí.

Yo agarre bien el palo esté y trate de tranquilizarme.

El entrenador silbó y Hayley vino a mi corriendo y yo la detuve empujándola y cayó al suelo, pero le ofrecí mi mano y la acepto.

- Siguiente! -dijo así el entrenador a cada rato.

Ya era el turno de Leonardo y Tristán.

Cuando el entrenador silbó Tristan fue con todo y se notaba que traía una ganas de golpearlo porque así fue, pero ambos se empujaron tan fuerte que cayeron los dos.

- Estos se traen maña no? -le pregunté a Hayley y asintió.

- Desde el año pasado que se tratan así. -dijo restandole importancia.

- El tinte ya les afectó la cabeza seguro. -dije y Hayley rió.

- Igual de esos dos el que mejor me cae es Leonardo, es más responsable y no es un mujeriego, eso creo. -dijo mientras tomaba su agua.

- Tristán lo es? -dije con intriga.

- Lo es, lo fue, no lo sé con certeza, pero si sé que con casi todas sus "parejas" siempre fue así: 3 semanas te hace creer que eres lo único y más lindo que hay, luego le aburres y te comienza a ignorar. Aunque eso no te lo aseguro, solo son más como rumores. -dijo y yo asentí.

- Hayley por casualidad no te gustaría ir a las 4 a un matrimonio. Mi mamá lo armó. -dije sonriendo amablemente.

- Claro, me encantaría. -dijo y yo le comencé a contar sobre donde encontramos.

[...]

Me comencé a alistar con un vestido negro que me llegaba un poco más abajo de la rodilla, encima me puse una casaca de cuero roja. Mi pelo lo peine y me hice una media cola, sacando dos mechones.

Me encontré con Hayley en Luke's y fuimos junto con mamá y Rory.

Ya en el casamiento Rory y mamá se sentaron a hablar y yo con Hayley decidimos irnos a pasear por ahí.

- Gracias por invitarme. -dijo Hayley.

- No hay de que, me caes muy bien por eso. -dije.