Capítulo 4: Memorias en las profundidades.

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El aliento escapa de su garganta entre jadeos indecisos mientras el líquido color carmín baja y se desliza bifurcando su camino al llegar a la nariz dejándose caer desordenadamente manchando la pálida piel de su rostro ensombrecido por el hollín y el óxido que tuvo que tragar cuando abrió con fuerza la mandíbula de la tercera criatura que se atrevió a entrometerse entre él y este extraño mundo; sentándose sin más sobre lo que quedaba de una de estas cosas para tratar de recuperar la compostura después del sorpresivo ataque de tres de estas amalgamas de madera y hierro. Con la mirada fija hacia la inmensidad de aquel pasillo alargado mágicamente y sin explicación. No hay que ser un genio para deducir que esto no es real, ¿Cómo va a ser real con un demonio!? Pensó por un momento el Supernova lanzando la cabeza de una de las criaturas que había tenido que matar, levantándose de su duro trono de madera podrida para observar el laberinto de puertas que se abren y cierran, aunque las risas burlonas de los niñatos invisibles son reemplazadas por gritos e insultos acompañados por llantos dolosos y algunos colmados en la ira más repugnante.

Ignorando este miserable y patético factor, Kid camina acelerando el paso con la vista siempre fija al frente buscando la salida de este infierno infantil; paso a paso observa que la pesadilla de carne y ojos que eran las paredes de aquel edificio...

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Ignorando este miserable y patético factor, Kid camina acelerando el paso con la vista siempre fija al frente buscando la salida de este infierno infantil; paso a paso observa que la pesadilla de carne y ojos que eran las paredes de aquel edificio ya no estaban para su gran alivio ahora se enfocaría en buscar la salida de aquí de donde quiera que sea " Aquí"; La asonancia de su andar fuerte y firme es el único sonido que se puede escuchar pues las risas y alaridos fantasmales de repente se detienen dejándole en un silencio casi absoluto un mutismo sospechoso escoltado por un pestilente aroma a pescado en estado muy avanzado de putrefacción y salitre; que parece haberse esparcido por toda la zona como si alguien hubiese tomado kilos y kilos de entrañas de pescado y bañado las paredes , el piso he incluso ventanas y puertas con dicha substancia provocando arcadas fuertes en el pelirrojo obligándole a tapar su nariz y boca con su mano y acelerar aún más su andar por el largo pasillo que parece tener conciencia de que su presa está intentando salir de sus entrañas.

Kidd: ¡MIERDA! ¡Que maldita peste! – Despotrica el hombre acelerando el paso al punto de comenzar a trotar de repente un sonido algo extraño, como un rugido o quejido muy tenue se escucha obligándole a voltear en su mismo observando de reojo hacia atrás logrando ver una silueta oscura y humanoide que parece contorsionarse, el autor de semejantes quejidos que parecen ser más y más claros conforme se acerca a él entre el bamboleo de lo que parecen ser sus piernas, aunque estas no se ven demasiado claras por la oscuridad. Pero al acercarse a la tenue luz de una de las ventanas los ojos de kidd se abren ampliamente al contemplar en todo su horroroso esplendor a aquella cosa que carecía de piernas ya que, más debajo de la cintura no hay piernas pero si lo que aparenta ser una cola, más bien parecía la lengua de alguna especie de animal gigantesco, aquella abominación no tenía facciones faciales claras pues lo que debería ser su rostro parece solo el resultado de un accidente con ácido que salió muy mal siendo una especie de boca envuelta en carne lo más visible en su faz , aquella boca casi invisible que estira la arrugada piel de la que salen aquellos sonidos de ahogamiento, como si obviamente le faltara el aire. Esta cosa comienza a acercarse a él con dificultosa rapidez dejando un rastro de una baba blanca, responsable de aquel fétido aroma , al arrastrarse su cuerpo hacia el intentando articular alguna palabra entendible pero parece que de su huesuda garganta solo sale ese sonido característico de alguien a quien le falta aire, sin pensarlo demasiado el pelirrojo empieza a correr , no va a quedarse parado esperando a que esa cosa lo tocase y mucho menos atraparle así que este pone pies en polvorosa corriendo nuevamente por ese largo pasillo interminable pero hay algo más , pues tanto las puertas , cuadros y ventanas parecen ser los mismos como si este no avanzara, como si estuviese en una rueda para hámster, un bucle infinito, mientras esa cosa si se acerca arrastrándose en su estómago hacia él.

Deliryum  Perfume of MadnessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora