Un vistazo al pasado es una pista del futuro.
- ¿Sabes que esto se debe de acabar, verdad, Bhaella? – James al sentir que ella se ponía rígida dejo de acariciar sus brazos. -Tú y yo sabemos que esto solo era temporal.
Indignada la joven Lenstrange se levanto desnuda para buscar sus prendas de ropa, el trato de detenerla, pero era claro que la jovencita le urgía salir de ahi.
- Lo sabias, Bhaella. Tu siempre lo supiste...- James se levanto y camino hasta ella. – Yo nunca te mentí respecto a mis sentimientos y mucho menos a la relación que tendríamos.
Enojada lo separa de ella y se pone su ropa interior.
- Tienes razón. Nunca me mentiste, James. La tonta fui yo, porque, por un momento pensé que esa maldita sangre sucia nunca te haría caso y te tendría la oportunidad de enamorarte.
-No la vuelvas a llamar así. – La toma del brazo y la acerca a su cuerpo. – No lo entiendes, Bhaella. No se trata de Lily, sino, de ti... Por la maldita obsesión que tienes sobre la pureza de la sangre. – el la mira a los ojos. – yo nunca podría enamorarme de una persona como tú, lo intente, créeme que lo hice, pero solo no pude. Lo siento.
Ella se separa de el y termina de vestirse, toma su varita y empieza a caminar hacia la salida para abandonar la sala de Menesteres. Tenia ganas de llorar y un enorme nudo en la garganta no le permitía responderle como se merecía a James Potter, solo sabia que tenia que salir de esa maldita habitación con su orgullo intacto.
- Yo también lo siento, Potter. –
Al abrir los ojos un fuerte dolor de cabeza me invadió y una punzada en todo el cuerpo me lleno de dolor, era increíble que una simple y corta la irrupción en mi cabeza por parte de Voldemort me pusiera en este estado, pero, supongo que pudo ser peor. Volteo a mi alrededor y estoy en una habitación cubierta de color blanco y muebles metálicos era claro que estaba en una enfermería, pero ¿Cómo había llegado hasta aquí?
Traro de levantarme, pero una fuerte mano atrás de mi impide que me levante y gruño en señal de frustración y me vuelvo a acostar.
- ¿Qué te paso, Potter? - una débil sonrisa se dibuja en mi rostro, pues lo menos que quería era oír la voz de Kakaroto detrás de mi y mucho menos deseaba que me preguntara sobre loque me había pasado, pero era claro que eso era lo que él quería. – te desmayaste en mis brazos, Geverhan... si vamos a hacer este trato necesito que este bien.
- Estoy bien, solo... un legeremante entro en mi cabeza y... y intente con todas mis fuerzas sacarlo de mi cabeza, pero, la presión fue tal que me debilite.
- ¿Solo eso? – dijo serio. Se acerco a mí y sentó en la pequeña camilla en la que estaba. – Geverhan, quiero que entiendas que nuestra relación va a ser mucho más estrecha a partir de ahora y no quiero secretos de ningún tipo entre nosotros.
Me remuevo incomoda en la camilla y al parecer él lo percibe, por que coloca una de sus manos fuertes y rígidas como el metal, sobre la mía. Lo miro a los ojos y le sonrió en forma de agradecimiento y me debato mentalmente si decirle o no lo de Voldemort.
- Fue el – digo tajante. Aparto su mano y se levanta de donde estaba. – Voldemort sabe que cruce la Frontera, porque Snape y Malfoy me vieron, pero el buscaba la confirmación de que yo estuviera viva y la consiguió cuando ... paso lo que paso entre nosotros, mis barreras de Oclumante se rompieron y lo deje pasar en mi mente.
- ¿Entonces, el sabe que tu estas aquí? – Pregunto volteando hacia mi serio y yo solo pude asentir.
- Pero el no sabe que estoy en el palacio del Rey Vegeta y mucho menos sabe de tu existencia y todo porque logre sacarlo a tiempo. – intento levantarme de nuevo, pero él se acerca rápidamente hasta mi y me detiene. Kakaroto niega con la cabeza y yo solo lo obedezco. Tomo su mano y entrelazo mis dedos con los suyos. – Kakaroto... él no puede saber que yo vivo aquí, por favor, haz que ellos piensen que estoy muerta.
- Dame una buena razón para hacerlo y lo hare, Potter.
- Tom ... Voldermort piensa o dice que está enamorado de mí. – la presión de su mano se hace mas fuerte y veo como una vena gruesa en su cuello se hincha. Esta enojado. – Pero yo no estoy enamorada de el y mucho menos siento nada por él.
- ¡¿Por qué mato a tu hermano?
- No, solo es por eso. Ese hombre me quito a la única familia que tenía, me persiguió por cinco largos años y 'como si no hubiera hecho suficiente, mato a muchas personas que amaba e intentaron defenderme. – me enderezo y lo miro a los ojos. – Yo jamás podría sentir por el lo que he llegado a sentir por ti.
Llevo una mano a mi mejilla y la acaricio de forma delicada y lenta.
- ¿Cómo vamos a hacer para que el señor Obscuro piense que está muerta?
- ¿Recogieron los cuerpos de los muertos en batalla? – Kakaroto asiente con una sonrisa burlona en su rostro. – Perfecto. Podría trasfigurar a una de esas chicas que los mortifagos mataron y hacer que se parezca a mí y ese cuerpo se lo podrías enseñar a Voldemort.
Retira su mano de mi mejilla y se acerca más a mí.
- Es una excelente idea. Pero hay un pequeño problema, cuando un grupo de refugiados llega a cruzar la Frontera, el Rey Vegeta pide un informe en el cual se detalla su estado de salud, su compatibilidad con algún sayajin y su lugar de residencia que tendrá a partir de ahora y con eso, Voldemort podría saber que estas vivan, incluso, sabrá donde te encuentras.
- Podríamos inventarme un nuevo nombre y respecto al informe todo podría ser igual, solo que en la foto podríamos tomar a una sayajin que nadie conozca o que este incluso, en tu planeta de origen y hacerla pasar por mí.
- Son muchos riesgos, Potter. – me acerco mas a el y deslizo una de mis manos por brazo. Kakaroto me toma de cintura y me carga, me sienta en su regazo y yo lo abrazo por el cuello. - ¿Y cual seria tu nuevo nombre, Potter?
- Lyanna Lenstrange. Ese era el nombre de mi prima ilegitima. Quiero llevar el apellido de mi madre.
- Me gusta ese nombre. – me acerco mas a al sayajin y lo bese de una forma suave y tímida. No era así como esperaba que fuera mi primer beso, pero no estaba mal. Siento que una de sus manos sube a mi mejilla y profundiza mas el beso, mientras que con la otra mano me pega más a él. – Mañana le.. les asignaran vivienda a tus amigos.
El Sayago abandona el beso y baja hasta mi cuello en donde siento como sus dientes rozan el contorno de mi cuello y como si fuera un acto de reflejo, llevo mi mano hasta su cabello y me aferro a él, me toma de los muslos y se levanta para depositarme en la cama.
Siento como su erección roza levemente mi centro y suelto un gemido, mi pecho subía y bajaba con respiraciones superficiales gracias a la atención que este hombre me estaba dando. – Por Merlín. – susurre.
- ¿Me dejaras marcarte como mía, Lyanna?
El sonido de la puerta hace que nos separemos y Kakaroto, se separa intempestivamente de mí.
- Largo... AHORA BROLY. –
El tal Broly se adentra más a la habitación y por el talante que tenia se veía que era algo grave.
- Es urgente mi señor. – él se acerca más y le extiende un rastreador. – Se trata del planeta Vegeta.
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Solo en tu mirada
FanfictionDespués de que acabará la Segunda Guerra Mágica muchos de los que peleamos en la Batalla de Hogwarts nos vimos obligados a huir al perder a la única esperanza que teníamos, mi hermano Harry Potter. Habían pasado cinco largos años de eso y solo tres...