Esta Castigada Señorita [Robert Pattinson] ©

<04>

- Vamos a almorzar- Sonrió.

- Y que vamos a comer? No hay nada- Bromee.

- Oye, dudas de mis habilidades para la cocina?- Reclamo, divertida.

- En dos horas y media?!- Pregunte, sorprendida. Yo me demoró una hora friendo un pedazo de pollo.

Sonrió orgullosa y camino a la cocina.

- Lavate las manos y cambiate el uniforme!- Ordenó. Cuando estaba por subir las escaleras volvió a hablar- Y llévate esa mochila!

Baje los pocos escalones que habia subido, tome mi mochila y subí a mi habitación.

Tire la mochila a los pies de la cama y me cambie, entre al baño, me lave las manos y baje.

- Siéntate linda- Ofreció mi abuela, me sente junto a ella y empecé a comer lo que habia preparado. Tengo que admitirlo, mi abuela cocina delicioso.

Estuvimos buen rato hablando, no nos hemos visto en mucho tiempo y ha sido fascinante para ella lo mucho que he crecido.

- Que comes cuando estas sola...?- Me quede callada, mirandola- No comes...

- Claro que si- Mentí- Como fuera, en algún restaurante.

- Ajá...- Me miró por sobre sus gafas- Que restaurante?

- El que encuentre...

Queria evitar el tema, así que tome los platos y los lleve a la cocina.

Cuando termine de lavar el último vaso, escuche un tintineo de mi teléfono, lo ignore, pero mi abuela dijo algo que me hizo salir disparada de la cocina.

- Quien es Rob?- Al oir esas palabras podría asegurar que mis ojos brillaron y emprendi carrera al comedor.

- Rob?- Tome mi teléfono y mire la pantalla.

<Hola> esa simple palabra, esas cuatro letras fueron suficientes para hacerme sonreír.

- Rob es tu novio?- Pregunto mi abuela, con cierta picardía.

- Que?! No- Respondí de inmediato- Es... Un conocido.

- Un conocido?- Un conocido con el que me he acostado más de una vez.

- Si...

<Te espero en el parque>

- Quiere que le ayude con una tarea...

- Perfecto, que venga- Sonrió- Les preparare galletas.

- No...

- Sin galletas, ok.

- No, me ha invitado a su casa- Excuse- Esta... Bien?

- Claro linda- Aceptó, me despedí de ella y salí de mi casa.

Corrí al parque serca de mi casa y me sente en una banca, junto a un hombre que leía un libró muy interesado.

- Buenas tardes, señorita Luna- Lo mire sorprendida y sonrió de lado, sin mirarme- Hay un auto en la esquina de ahí- Señaló levemente con la cabeza- La vere ahí.

Me levante y camine lentamente al auto, procurando no ver a nadie que me conozca.

Me subí en la parte de atras e intente esconderme lo mejor posible.

Minutos después llegó él y se subio, volteó a mirarme y sonrió.

- Hola.

- Hola- Susurre.

- Vamos?- Asenti y arrancó el auto. De camino a donde? No lo se, tampoco me importaba mucho.

Veía por la ventana el caminó, el aire golpeaba mi rostro y por primera vez, durante todas estas semanas, me sentí libre con él.