fuego, Fayna 1.

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Abro los ojos. Todo está borroso. Cuando se me acostumbra la vista veo una figura de un hombre.

- Hola Fayna

Fayna... ¿Ese era mi nombre? Al parecer.

- El experimento ha salido bien -. Dijo.

¿Experimento? Me doy cuenta de que estoy metida en una cápsula de cristal y... también soy claustrofóbica. La ira se apodera de mí, me tapo los oídos me siento en el suelo y empiezo a dar patadas. Necesito más espacio.

Algo en mí se despierta, tengo calor, como en un día caluroso de playa. Empiezo a sudar, demasiado calor. Grito y... PUM. Ya no hay cápsula.

Miré al hombre que tenía en frente, parecía satisfecho, en su cara se veía la alegría.

Estaba muy cansada, me iba a desmayar. Busqué algo en lo que agarrarme, vi una mesa. Intenté ir caminando hasta ella pero me iba a caer. Justo antes de desplomarme me agarré a una tubería cercana.

- Fayna, no toques eso. Lo vas a fundir.

¿Fundir? Miré mis manos, estaban calientes. La tubería se empezó a poner naranja, al rojo vivo. Lo normal hubiera sido quitar las manos para no quemarme pero... no me estaba quemando. Miré al hombre. Él me miraba con curiosidad. Tras recuperar el aliento aparté mis manos de la tubería.

Cuando vi que no me iba a hacer daño me fijé en la sala en la que estaba. Parecía un laboratorio, la sala no estaba muy bien iluminada. Había mesas con informes. Agarré unas hojas dispuesta a leerlas pero... no podía, ¿No sé leer?.

Miré al hombre. Él me devolvió la mirada.

- No puedes leer, has perdido TODA tu memoria. Pero tranquila, todo esto valdrá la pena. Seguro que no entiendes nada, no sabrás quién eres, seguro que no sabes ni cómo es tu cara.

- ¿Qué me has hecho?

- Lo mismo que a ellos Fayna -. Señaló unas cápsulas, eran iguales a la mía. Dentro de cada una de ellas había una persona. Había 3 en total -. ¿No te acuerdas de ellos?

Los miré uno a uno, ¿Se suponía que tenía que saber quiénes eran?.

- No sé quiénes son.

El hombre se empezó a reír -. Sígueme, te enseñaré tu habitación. No podemos empezar hasta que estén todos despiertos así que... no sé lee un libro o algo, ah si no puedes leer... bueno pues duerme un poco. En unas horas vendrán a buscarte y te irán explicando en qué consiste tu misión.

¿Mi misión? Miré la habitación, mi habitación. Parecía de una cárcel. La cama estaba en una esquina de la estancia. Había una estantería llena de libros... los cuales no podía leer porque no me acordaba de cómo se hacía. La ventana tenía barrotes, para que no me escapara seguramente. Me senté en la cama y miré al hombre.

- Bien, yo me voy. Tengo que estar presente por si alguno se despierta...

El hombre salió de mi habitación no sin antes cerrar la puerta con llave... bonito detalle.

Me asomé entre 2 barrotes de la ventana para ver el paisaje. Desierto ¿Eso era todo? Pues menudo mundo.

Me tumbé en la cama y me dormí.

Me despertaron. Abrí los ojos de golpe. Una mujer con bata blanca había entrado en mi habitación.

- Tú eres Fayna ¿Verdad? Encantada de conocerte, soy Belia.

- ¿Qué quieres?

- Supongo que tendrás preguntas ¿No? Pues yo te las voy a responder. Y también te enseñaré cosas básicas que has olvidado.

- ¿Como leer?

Belia me sonrió -. Sí, como leer -. Ven conmigo.

Me llevó hasta una sala con 2 sillas, una enfrente de la otra.

- siéntate Fayna.

- Bien.

- Bueno, empezaré por contarte por qué tienes poderes. Como has podido notar antes, tu poder es el del fuego. Esta asociación, la ECM...

- ¿De qué son las siglas?

- De Elementos Contra el Mal. Bueno como estaba diciendo, la ECM pretende terminar con los habitantes de los bosques, cada vez que una empresa intenta talar un par de árboles se ponen como locos. Y eso es un problema.

- Osea que esto no es todo lo que hay, existen empresas, hay bosques...

- Sí, esto es solo un laboratorio en el que buscamos una solución para el problema que te he dicho. En realidad hace un par de años ya te enviamos a una misión, sin poderes claro, la empresa todavía no tenía suficiente dinero para lo que vamos a hacer ahora...

- ¿Ya tuve una misión?

- Sí, y fracasaste... os enviamos a Tamara y a tí a infiltraros entre ellos... la cosa no salió muy bien, pero bueno lo importante es que te centres en esta misión. No tenemos dinero suficiente para repetir la prueba si sale mal así que... tiene que funcionar.

¿Tamara? ¿Quién era Tamara...?

- Bueno Fayna, tu misión es acabar con todos los habitantes de los bosques...

- ¿Perdón? ¿Exterminarlos? ¿No se puede razonar con ellos?

Belia se rió -. No se puede razonar con ellos, son... salvajes. No hay otra, hay que matarlos.

- ¿Y si me niego?

- Bueno, si "Te niegas" no nos quedará otra que acabar contigo, sabes demasiado, la misión es secreta. La verdad lo único que te hace necesaria son tus poderes, si no quieres cooperar podemos extraértelos y dárselos a otra persona que se preocupe más por el bien de la humanidad... Claro que morirías en el proceso... Bueno la elección es tuya, volvamos a tu habitación, en un par de horas te enseñaré a manejar tus poderes y a leer, escribir... y todas esas cosas.

Me llevó hasta mi habitación y la cerró con llave, dejándome encerrada otra vez.

Los elementos de la ECMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora