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Renuncia de derechos, los personajes que salgan aquí son de sus respectivos autores.

El viaje fue realmente tranquilo.

Goku estuvo meditando como habituaba a hacer en cada mañana mientras las dos niñas descansaban plácidamente a su lado.

Hasta hace unas horas.

-Está delicioso -habló Kurumi comiendo las galletas que su madre había preparado para el viaje pues no tuvieron tiempo para desayunar.

Kaoru las despertó y después de lavarse se subieron al carruaje, fruto del sueño cayeron rendidas y se despertaron hace dos horas.

-¿No comerás Onii-chan? -preguntó Kurumi observando al rubio, quien llevaba con los ojos cerrados desde que se habían despertado.

Yuki, que también estaba comiendo, posó sus ojos dorados en Goku y notó que el chico estaba absolutamente concentrado en su meditación.

Tanto que parecía estar en otro mundo.

"Me pregunto qué estará haciendo"- pensó Yuki con gran curiosidad, conociendo a su amigo fijo que era algún método para volverse más fuerte.

Y no tuvo que esperar más para saberlo.

-¡ONII-CHAN DESPIERTA! -Kurumi gritó al oído de Goku quien se sobresaltó y levantándose de golpe miró por todas partes repentinamente.

-¡¿Qué sucede Kurumi-chan?! ¿Se encuentran bien? -preguntó Goku viendo a sus dos amigas, que le veían con perplejidad por su reacción.

Una reacción un tanto exagerada.

-N-no es nada Onii-chan... sólo que llevas ahí mucho tiempo con los ojos cerrados -contestó Kurumi saliendo de su desconcierto anterior.

-Ah eso jeje, estaba meditando y creo que me concentré demasiado -respondió a su vez Goku rascándose la nuca con su habitual sonrisa.

Realmente, hizo más que meditar.

Goku estaba intentando sentir el maná de su alrededor, ahora que dominaba mucho mejor su maná pretendía escalar un paso más allá...

Y lo consiguió.

En las tres primeras horas logró sentir ligeros rastros de maná. Sintió el maná de Yuki y Kurumi pero no lo suficiente como para distinguirlas.

Tras dos horas más su percepción de maná mejoró, además de la familia Nonaka ya podía sentir el maná de los animales de alrededor.

Y eso fue lo que hizo básicamente.

"Siento que será una gran ventaja en el futuro"- indagó Goku con una sonrisa, satisfecho por su logro pero eso le dejó cansado mentalmente.

Necesitaba descansar un rato.

-Nunca cambiarás Onii-chan -Kurumi se quejó inflando sus mejillas tiernamente y le extendió el plato con galletas- Ten, ¡sé que tienes hambre!

-Es cierto, muchas gracias Kurumi-chan -el chico tomó una galleta y comenzó a comerla ansiosamente como hacía de costumbre.

Yuki negó al ver a su amigo comer así, pero tras observarle durante unos segundos pudo percatarse de que estaba un tanto cansado.

¿Qué había estado haciendo?

-Cuando termines de comer, deberías dormir -le aconsejó Yuki mirándole de reojo y Goku se sorprendió, ¿ella sabía que estaba cansado?

Re: Héroe transmigranteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora