41.

232 20 1
                                    

—Lo ideal para la boda sería colores pasteles, ya sabes color muffin y rosa pálido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Lo ideal para la boda sería colores pasteles, ya sabes color muffin y rosa pálido. Con orquídeas. ¿Que dices?—menciono Mikasa mostrándome unos catálogos sobre bodas
—¿Que cosa?—pregunté distraída mirando mi celular
—_______ para la boda!!—grito Mikasa
—Ahh si,las que prefieras tu—dije sin interés.
—¿Y el vestido ya lo decidiste?—pregunto Historia mostrándome unos diseños.
—El que más te guste—dije.
—Estas diciendo esto solo para deshacerte de nosotros ¿Verdad?—pregunto Mikasa alzando una ceja.
—Si—sonreí—Tengo pacientes y...una cirugía asi que, nos vemos—entre al ascensor, y en dos minutos llegue a urgencias encontrándome con Eren.
—Hola—sonrió besándome mientras yo lo tomaba de la camisa y entrábamos a una sala de descanso que estaba frente a nosotros—Alguien está muy desesperada por sexo.
—Necesito sentirte. Mikasa e Historia me abruman con cosas de la boda.

Quite la playera azul de su uniforme mientras seguíamos besándonos, caminamos hasta la pequeña cama deshaciéndose de mi blusa y mi sosten para acariciar mis pechos. Quito mi sosten lamiendo mis pezones mientras que mi mano bajaba a su entrepierna tocando su pene que estaba ansioso de salir, baje su pantalón junto con la ropa interior masajeandolo de arriba abajo.

—Ahhhh si, asi—gimió, bajo su mano a mi entrepierna por dentro mi pantalón y ropa interior acariciando los pliegues para introducir un dedo para entrar y salir rápido mientras nos mirábamos a los ojos y gemia en voz baja. Me beso ahogando mi gemido sacando su dedos para quitar mi pantalón y sentirlo dentro de mi de una estocada.
—Mierda...—murmure sonriendo tomándolo de los hombres comenzó a embestirme despacio subiendo mis piernas a sus hombros—Si..si..ahhh
—Me encantas—beso mi cuello tomando con su mano derecha uno de mis pechos penetrandome con más fuerza sintiendo mi vientre contraerse y venirme al mismo tiempo que el—Te amo—murmuró entrando y saliendo lentamente sintiendo como el liquido blanco chorreaba en mi vagina.
—Dios,necesitaba sentirte—sonrió acomodándose en la pequeña cama y así abrazarnos mientras mirábamos el techo.
—¿Mucho estrés por la boda?—pregunto acariciando mi hombro
—No pensé que planear una boda seria así, es decir. Pensé que podríamos casarnos en el patio de la casa,compramos comida y alcohol y es todos. Poca gente y algo muy rapido—me apoye en mi mano mirándolo.
—¿Ese es tu sueño de una boda?
—Nunca eh soñado con una boda Eren..—dije sincera
—¿Hablas enserió?
—Si. Nunca me vi con un vestido blanco espojando en un salón enorme con mucha gente. Para serte sincera jamás me estando casada—mordí mi labio inferior mirándolo
—¿Y entonces como te imaginabas con Reiner si era tu prometido?—se giro haciendo lo mismo que yo,apoyando su cabeza en la mano.
—Solo nos casariamos por el civil y luego volveríamos a trabajar. Sin luna de miel ni nada—dije sincera.
—Lo entiendo. Pero, ahora yo seré tu esposo y jamás te engañare. Estaré contigo para toda la vida, así que puedes soñar y ser lo más cursi posible. Vamos a estar toda la vida amándonos—acaricio mi mejilla sonriendo.
—Somos cirujanos amor. Salvamos vidas,debemos ser algo rápidos e improvisados. No porque no estemos en una iglesia signifique que no seremos esposos.
—En eso tienes razón. Pero aún así, quiero darte un anillo, y yo quiero una argolla para presumirle a todo mundo que soy un hombre casado y que mi esposa la doctora Dal Monte-Jaeger es la mujer más maravillosa de la tierra—se acerco a besarme con dulzura a lo cual yo correspondi.
—Hagamos esto—me coloque mis bragas junto con mi sujetador tomando una post-it que siempre cargaba conmigo junto con una pluma para anotar algunos síntomas de pacientes—¿Que nos vamos a prometer?
—¿De que hablas amor?—pregunto sonriendo.
—Si. Escribamos nuestros votos aquí,es más casemonos aquí mismo, en esta habitación—sonreí sentándome en su regazo
—¿Aquí?—río
—Si. No importa donde nos casemos. Yo me sentiré tu esposa—sonreí besandolo
—De acuerdo—tomo el post-it y la pluma mirándome—¿Que nos prometemos?
—Apoyarnos mutuamente
—De acuerdo—comenzó a escribir y luego me miro—No mirar hacia atrás—dijo y volvió a escribir.
—Cuidarnos aún cuando estemos enojados—sonreí y el seguía escribiendo.
—No rendirnos aun cuando las cosas esten muy mal.
—Amarnos incluso en la muerte..—levanto la mirada asustado cuando dije la palabra muerte.
—Esto es por siempre—concluyó con su firma y me dio el posit para firmalo.
—Por siempre..—sonrei—Ya puedes besar la novia.
—Con gusto—me tomo del rostro besándome con dulzura.
—Tengo cirugía, en la noche podemos celebrar—ambos reímos para después cambiarnos.
—Esperare con ansias señora Dal Monte Jaeger— nos pusimos frente a frente cambiados y sonriendo.
—De ahora en adelante tendrás que dormir conmigo porque tengo problemas de abandono—sonreí y el solo negó con su cabeza mordiendo su labio inferior.
—Yo jamás te abandonaré ________. Tu eres mi vida...

NO CONTROL;Eren Jaeger × LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora