IV

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El cuarto: Con amnesia

Misa resplandece. No es novedad.

Light cae. Tampoco lo es.

Ambos son dos personas amnésicas con las que nadie se molesta en empatizar. Y se tienen el uno al otro a pesar de la nula privacidad que poseen y los ojos clavados en su espalda que siempre perciben.

Su relación es particular. Pues Light no le dedica ni un solo gesto a su supuesta novia mientras que ella no borra la sonrisa de su rostro.

Misa sabe que Light no puede fingir algo que no vivió. Y Light sabe que él es la única cara amigable para Misa.

...

—¡Light! —La oye. Junto con L se dirige a la habitación que comparten así puede dormir mientras el detective mantiene una computadora encendida a pocos metros de distancia y el sonido de las teclas a un volumen normal hasta llegar a asimilarse, en la mente de Light, a su respiración acompasada.

El castaño bosteza y vagamente repara en la presencia de la rubia y brillante modelo cuyo pequeño cuerpo se estrella sin previo aviso contra su pecho.

—Oh —respira él, y corresponde el repentino abrazo con su brazo sin esposas. Su pequeña nariz se sumerge en el dorado cabello de su novia y absorbe su dulce aroma mientras confunde sus entusiastas palabras y pierde el sentido de la orientación.

—¡Es tan aburrido aquí! —Misa se separa solo unos pocos centímetros y su puchero no ayuda a que Light la tome en serio. Se ríe levemente y cuando L comienza a explicarle con sequedad a Misa el por qué se halla bajo su vigilancia al mismo tiempo que ella repite que no tiene nada que ver con el caso Kira, Light siente que su día se completa.

...

Nunca se preguntan por qué no dejan de ser novios.

Ambos simplemente se comprenden en un mundo injusto.

Es Light quien cae - Light x MisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora