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Nota importante: He estado poniendo notitas con las aclaraciones/definiciones en los comentarios. Cada que vean un * es porque hay definición en la sección de comentarios del párrafo. Orasí, lean. <3


Tomamos el coche de Temo, un BMW elegante, brillante y de baja altura. Ronroneaba bajo el capó, y el interior parecía una nave espacial de la NASA. Super alta tecnología.

Casi me caigo por las tablas del suelo cuando intenté subir. El asiento del pasajero delantero parecía estar completamente en el asiento trasero.

—¡Lo siento! —Temo dijo— Aaron estaba aquí. Tendrás que adelantar el asiento.

Lo hice, sosteniendo mis tobillos en el aire mientras esperábamos, y esperábamos, y esperábamos, a que el asiento llegara a una posición en la que no me sintiera como si estuviera sentado en la silla alta de un niño. Los dos nos reímos cuando por fin me acomodé, la pesadez de nuestra conversación en el estadio desapareció como si un globo de helio hubiera estallado y nos hubiera dejado mareados.

—¿Para qué estás de humor? —Preguntó Temo.

—Cualquier cosa. Soy un comensal aventurero.

—¿Oh? —Sus cejas se alzaron—. ¿Cocinas?

—Soy un comensal aventurero cuando salgo. Cocinar en... —hice una mueca—. Bueno, Emmet no ha muerto de desnutrición en el último año. Eso es probablemente porque vive a base de batidos de proteínas y cereales.

—Tomas tus victorias donde puedas.

—Está claro que tú eres un chef de primera.

—¿Qué?

—Tienes la onda de uno. Tienes ollas y sartenes de cobre, ¿no? Las elegantes de Williams Sonoma*. Y un montón de platos de cocina de... ¿cómo se llama esa ridícula línea francesa?

—¿Le Creuset?

—Sí, esa. Sabías el nombre, así que debes tener sus platos. Ergo, eres un chef de primera.

—Me siento halagado, pero no creo que tu razonamiento deductivo sea el adecuado aquí. ¿Solo tener las vajillas me convierte en un gran chef? Podría poseerlo todo para exhibirlo, o poseerlo todo y abusar de él en la cocina. Hacer queso a la parrilla o calentar judías verdes de una lata.

Arqueé las cejas. Tuvo la delicadeza de intentar al menos parecer avergonzado a través de su sonrisa.

—Tendrás que venir a comer, es todo lo que digo, si vas a acusarme de ser un buen cocinero. Necesitas una prueba experimental.

—Manejas una negociación difícil, pero seguro. Te aceptaré el desafío.

Los dos sonreíamos cuando Temo entró en un acogedor aparcamiento frente a un pequeño centro comercial detrás del Target. Delante de nosotros había un cartel de neón que anunciaba cerveza Shiner en un conjunto de ventanas oscurecidas.

—Esto parece ligeramente turbio.

—¿No es así? Nunca he estado aquí antes, pero he oído buenas críticas.

—¿A dónde me llevas?

Se quedó callado mientras salíamos de su coche deportivo como si estuviéramos haciendo sentadillas. Todo su coche no llegaba al suelo de mi camioneta.

Durante todo el camino hasta la puerta principal, acribillé a Temo con conjeturas sobre dónde estábamos. Lo seguí como si él fuera la madre pato y yo su patito, y en cuanto abrió la puerta oscurecida, me asomé por encima de su hombro.

you and me | aristemo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora