Capítulo 15

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Le pareció que el suelo se abría bajo sus pies. El ruido a su alrededor se hizo pesado, como si estuviera debajo del agua. El hombre que tenía delante parecía que le hablaba, pero ella no veía sino sus labios moverse.

‒ ¿Emma? ¿Emma...?

De repente, su nombre fue como una agresión para ella, volviéndose súbitamente claro y fuerte. Se sobresaltó antes de mirar fijamente a Killian de nuevo.

‒ ¿Qué? Pero...¿Qué haces tú aquí?

‒ Bueno...Me he enterado de que Hope está enferma...

Emma frunció el ceño.

‒ ¿Te has enterado? ¿Quién...?

‒ Eso da igual, he vuelto y...

Emma soltó una risita irónica.

‒ Ya, has vuelto...¿Y de dónde, exactamente? Porque la última vez que tuvimos noticias de ti estabas...¿En Seattle? O en Canadá, ya no sé...

‒ ...

‒ Te acuerdas de que tienes una hija, está bien eso

‒ Emma...Fuiste tú quien quisiste que me fuera

‒ ¡Porque me engañaste!‒ soltó algo más alto de lo que habría querido, captando las miradas de los clientes. Se dio cuenta y suspiró antes de girarse hacia la barra ‒ Dos cafés, Granny‒ pero ante la inmovilidad de la anciana, insistió ‒ Granny, dos cafés.

‒ S..Sí, sí, en seguida

‒ Emma...

‒ ...

‒ Escucha, solo he venido por Hope. Saber cómo está, si está aguantando, y tú...

‒ ¿Yo?‒ dijo dándose la vuelta ‒ Te estás quedando conmigo. Si realmente te importara, no habrías hecho lo que hiciste‒ se giró, dejó con violencia un billete sobre la barra antes de coger los dos cafés y salir. Hook puso los ojos en blanco y la siguió afuera.

‒ ¡Emma, espera!

‒ ¡No tengo por qué recibir órdenes tuyas!

‒ Lo sé, lo sé...No era eso lo que quería. ¡Me gustaría que habláramos!

‒ ¿De qué, Killian? Creo que nos lo dijimos todo hace ya unos meses. Tú hiciste tu elección. Me engañaste, te marchaste. Punto.

‒ Emma...

‒ Escucha, sé que has vuelto con buenas intenciones, pero...Tu lugar ya no está aquí.

‒ Sigo siendo su padre

‒ Lo sé, ella lo sabe también. Pero tu sitio ya no está con nosotras. Nosotras...Hemos seguido adelante, hemos cambiado...

‒ Yo también, Emma, y este alejamiento me ha enseñado una cosa: os quiero. Cometí la mayor de las tonterías de mi vida...Abandonándoos.

‒ Solo abandonaste a tu hija, yo te puse de patitas en la calle voluntariamente. Perdóname, pero tengo que ir a trabajar.

‒ Emma...

‒ ¡NO! Ya no tienes nada que decir

Entonces Emma se alejó sin darse la vuelta ante la mirada de Hook. Cuando regresó a la comisaría, Mulan vio la cólera en los ojos de Emma.

‒ ¿Algún problema?

‒ ¡No me lo puedo creer, no lo creo! ¡Ha vuelto, ese desgraciado ha vuelto!

‒ ¿De quién hablas?

‒ ¡Hook! ¡Mi ex ha vuelto!

‒ Pero...¿Por qué?

¿Y después?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora