ocho

305 38 2
                                    

un silencio incómodo se plantó entre ambas chicas, hasta que la menor decidió romperlo.

"minnie, si yo hubiera sabido que eras tú... no habría aceptado. lo siento demasiado"

minnie solo alzó su mirada mientras asentía.

"no pensé que miyeon fuera capaz de hacerte esto, se veía que te amaba" continuó

"no creí que fueras capaz de dejar tu trabajo y todo por lo que pasaste para hacer esto, yuqi" dijo la tailandesa evitando tocar el tema

yuqi se sentó al lado de minnie suspirando, en realidad ella tampoco tenía idea de por qué lo había hecho además de conseguir dinero fácil. minnie tenía razón, pero era muy tarde para arrepentirse.

"¿sabes que planea miyeon?" pregunta mirándola a los ojos, mientras yuqi negaba preocupada. por más que quisiera ayudar a minnie, no sabía que planeaba la mayor ni de que era capaz.

hablaron por un tiempo sobre cosas triviales tratando de distraerse de la situación en la que se encontraban, y cuando lo estaban logrando escucharon la puerta abrirse. a ambas les recorrió un escalofrío por todo el cuerpo, solo podían esperar lo peor.

miyeon entró a la habitación en completo silencio mientras dejaba unas bolsas negras en el suelo, procedió a darse la vuelta para encontrarse con la mirada de ambas.

"song yuqi, nos vemos mañana" habló duramente mientras la veía fijamente a los ojos

"pero no he hecho nada aún, se supone que-"

"ya hiciste suficiente por hoy, te puedes marchar. mañana tendrás algo que hacer" la interrumpió mientras fruncía el ceño, sabía que la pelirosa planeaba algo.

yuqi se levantó y le dió una última mirada a minnie antes de irse, dejando a las dos chicas solas.

"más te vale no estar ocultándome nada, nicha" dijo suave pero amenazadoramente mientras se acercaba a la menor, quien solo negó mirándola a los ojos.

"bien, te traje algo" sonrío mientras iba por las bolsas negras.

minnie se estaba poniendo nerviosa, sus manos empezaron a sudar y su corazón iba a mil ¿moriría en ese momento?

por suerte miyeon volvió con una bebida energizante, sorprendiendo a la tailandesa. quizás en ese momento no le haría daño.

"abre la boca" murmuró miyeon mientras abría la botella.

la menor obedeció y miyeon empezó a darle de beber de la botella, la contraria bebió sedienta porque no se había hidratado hace horas dejando caer unas gotas por su garganta, al ver esto la castaña rió entre dientes y retiró la botella de los labios de minnie, quien la miró extrañada. miyeon empezó a lamer su garganta por donde se había derramado la bebida, y por más que minnie se quería resistir no podía evitar que su cuerpo reaccionara, soltando un gemido casi inaudible; se sentía asqueada de sí misma. miyeon se detuvo al escucharlo, formando una media sonrisa para luego sentarse encima de la menor, quien se quejó al sentir el peso de la mayor en sus piernas.

la castaña acercó su rostro y susurró en el oído de minnie.

"te amo demasiado, pero me aseguraré de hacer de tu vida un infierno como tú lo hiciste con la mía."

getaway | miminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora