Symphony of the seas

Capitulo 6

Esa noche el océano estaba relativamente en calma y esto preocupaba a Forsenton, de el dependía que el barco no chocará y, al menos, llegue sano a la mañana.

—La temperatura es de -2 grados —leyo en una pantalla— con razón hace demasiado frío

—Estamos en invierno navegando en medio del Atlántico Norte, es claro que hace frío —dijo obvio el timonel Rogers

—Mas vale que no choques con un iceberg, no quiero otro Titanic, dejo el puente

—Pero Spring no llego todavía —dijo preocupado

—Ahora llega, además todo está automatizado, solo tenés que girar el timón

—Seria fácil girarlo si no hubiéramos sufrido esa falla al dejar Buenos Aires

Antes de zarpar hubo una falla en los sistemas y el barco no disponía de piloto automático, en otras palabras, dependía del timonel que el barco no choques con algo.

—Den aviso a los vigías que abran los ojos hasta las 8 de la mañana —dijo Spring llegando al puente de mando

—Si señor

La sala de comunicación del barco estaba al lado del puente por lo que siempre escuchaban todo lo que pasaba ahí.

Pero el operario estaba muy ocupado con todo el trabajo que tenía, por qué si bien los pasajeros se comunicaban con sus celulares, había ciertos mensajes que era necesario transmitirlos en código Morse. Además servía para no perder la ubicación del barco.

—Mira esto, este quiere que lo pasé a buscar su propio tren privado, pobre iluso —leyo el mensaje Sparks

—Con tanto trabajo que tengo ni leo los chismes ahora —dijo sacándose un auricular— pero la señora Del Valle no para de mandarme mensajes

—Es obvio que le gustas Mack

—Prefiero las de mi edad

—Convenientenente está soltera y vos necesitas plata

—Plata vas a necesitar para la cirugía después de golpearte la cara —bromeo

Otro operario llegó con más mensajes para ser enviados.

—¿Mas cartas? —pregunto incrédulo Sparks

—Hijo de mier... —maldijo Mack sacándose los auriculares —es ese idiota de MSC de nuevo

—¿Que dice ahora?

—Otra vez advierte sobre icebergs

—Decile que se calle

—Voy a decirle más que eso —se preparo para lanzar el mensaje —cerra el pico, estoy trabajando con Cabo Race, con eso tuvo suficiente

Pensó que con eso tuvo suficiente pero el operario del MSC, que solo hacia su trabajo, se canso de su mala actitud y apagó el equipo.

Emanuel y León estaban en el camarote de este último, Emanuel esperaba a que León termine de vestirse, estaba en el balcón apreciando la vista nocturna.

—Mierda que hace frío —dijo al entrar —estas hermoso como una obra de arte

León se sonrojo.

—Vamos —dijo abriendo la puerta

Ambos salieron al pasillo con dirección al pasillo principal del barco. Pero León vio que un camarero los estaba siguiendo, obviamente mandado por Charlie.

—No te des vuelta —dijo divertido

Pero Emanuel hizo caso omiso y vio hacia atrás. Echaron risas y comenzaron a correr mientras el camarero los perseguía.