Capitulo 2

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¿Ves hija?- pregunto un señor a su hija- es un gran propulsor que va al eje del barco y eso hace girar las hélices, es lo que hace esas olas- explico señalando al agua

Es un barco hermoso- algo Iván

Se parece al Costa Concordia- dijo Alejandro apoyado en el barandal

No seas tonto- chisto- este es más grande y mejor, además de que no puede hundirse- agrego

¿Sabes a que otro barco lo llamaron así?- pregunto Nahuel a un lado

El Titanic- respondió Alejandro- pero eso fue hace mucho

Nunca digas nunca- rio Ivan- además hay más cosas para hacer

No te subiste a los coches chocadores por miedo- agrego Nahuel- pero no te culpo, yo hubiera hecho lo mismo

El trío seguía riendo hasta que un León enojado se abrió paso a traves de ellos sin siquiera saludarlos.

Che- lo llamo Iván molesto- mira por dónde vas

¿Y a este que le pasa?- pregunto Nahuel

Está así desde antes de subir- respondió Alejandro- esta raro

Siempre es raro- rio Ivan

Está más raro de lo normal- dijo Nahuel- seguro no fue a la charla de seguridad

No me hagas acordar que tengo que ir dentro de unas horas- recordó Alejandro

Pregunta si te podés subir a un bote primero- rio Ivan

Alejandro era el más mayor del curso, el había repetido y por ende tenía un año más que todos. Tenía 18 años así que básicamente ya era un adulto.

León siguió su camino sin prestar atención a su alrededor, la gente lo veía pasar y muchos se apartaban de su camino.

Camino hasta su camarote, que no compartía con nadie, cerró la puerta y se sentó en la cama.

Se agarró la cabeza mientras sus emociones se agolpaban entre si, perdía el control de su mente y sentía como si estuviera encerrado esperando su libertad.

Grito de frustración y comenzó a hacer desorden por todo el camarote, golpeaba las almohadas y tiraba todo lo que encontrará.

Salió al balcón y respiro agitado, veía el atardecer y en vez de disfrutarlo solo estaba estático viéndolo.

¡Odio estar acá!- grito al viento- ¡¿Quien carajo me mandó a venir a este viaje de mierda?!- grito más fuerte

Su celular sonó debido a una llamada de Charlie, tiro el celular adentro del camarote y salió dando un portazo.

La hora de la cena llegó y todos los chicos se dirigieron al comedor, allí cada uno se sirvió cuánta comida querían, cenaban juntos mientras hablaban de sus actividades a futuro.

Todos menos León, el estaba sentado en una mesa junto con Charlie y gente que se veía importante.

Cambia la cara- pidió recto Charlie

León acato la orden pero luego cambio de vuelta la cara.

Más allá de la jurisdicción del abogado Ramírez mis abogados apelarán- dijo Charlie

Eso dijo Bernasconi pero la suprema corte no lo acepto- dijo un señor mientras bebía vino de su copa

Pero el abogado Ramírez no tiene jurisdicción en el pueblo de Resada- informo otro señor

Eso creía yo hasta que este año le otorgaron jurisdicción alli- dijo Charlie

A León eso no le interesaba, estaba quieto viendo cómo sus amigos, mejor dicho compañeros, cenaban juntos, reían juntos y compartían momentos.

Symphony of the seasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora