Como miembros de la cofradia, tenemos el deber de proteger a los inocentes e indefensos de la amenaza que los asecha a todos al caer el solo.
Los demonios.
Durante mas de 1000 años nuestra gente a luchado en contra de Kibutsuji Muzan y sus creacione...
En un lugar lejano en las cercanías de un bosque no muy grande, de una pequeña casa en el campo cuyos alrededores se encontraban decorados con distintas flores que iban desde las clásicas rosas rojas, flores de cerezo, crisantemos entre otras, en cuanto a la casa se trataba de un lugar pequeño pero bastante acogedor y muy bien cuidado.
Las luces del interior estaban encendidos y había voces provenientes del interior, lo que evidenciaba el que hubiera alguien viviendo allí.
La puerta del lugar fue abierta y de ahí saldría una muy hermosa chica de largo cabello color rosa con las puntas de color verde neón que tiene atado en tres trenzas gruesas con una mirada entusiasta y llena de alegría.
Llevaba puesto una camisa de color blanco con el escote desabotonado acompañada por una capa negra con patrón de corazones al reverso, una falda corta de color negro, medias de color verde oscuro y unos tacones negros y abajo de su hombro derecho tenía una insignia con un kanji que significa (Destruir).
Kanjori Mitsuri - Pilar del amor.
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-Fue gusto volver a verla, pero ahora debo retirarme - pronuncio la pelorosa alegre como siempre.
-El gusto fue mio Kanjori-chan - respondio una voz femenina de la misma forma - Aunque preferiría que no arriesgaras tu vida de esta forma.
-Agradezco mucho su preocupación de verdad, pero este es el camino que escogi.
-Espero que lo que buscas al menos merezca la pena el ponerte en riesgo constantemente.
-Lo vale - lo dice sonriendo ampliamente - y al final es como mi maestro me dijo, el resultado es proteger a los mas indefensos de los demonios e incluso si eso no es correcto y estemos en nuestro peor momento podemos aferrarnos a esa motivación.
La mujer con la cuál se encuentraba conversando guardaría silencio por un momento.
-Entiendo lo que dices y también veo que tuviste un buen maestro.
-El mejor que pude haber tenido.
-Espero volver a verte pronto.
-Lo mismo digo - pero antes de irse - Se que esto no me incumbe pero le ruego que al menos intente arreglar las cosas con él y escuchar lo que tenga que decir, entenderlo y se que él hará lo mismo por usted.
-Tu y él saben muy bien cual es mi postura al respecto de su decisión.
-Si lo se, pero hasta cuando? El tiempo perdido no podrán recuperarlo, aun así, no es demasiado tarde todavía pueden arreglar las cosas entre ustedes y comenzar de nuevo.
-¿Porque te importa tanto?.
-Porque es mi mejor amigo y poniéndome en su lugar yo no quisiera estar en malos términos con mis padres si yo...
