Oneshots Damian x Anya || Danya ~ Spy x Family

Seduceme Despacio

Un muchacho de cabellos castaños transitaba por las amplias calles de su ciudad. Sostenía su mochila mientras memorizaba la pieza de una canción que escuchaba con sus auriculares.

Creaba el escenario en su cabeza a la vez que recordaba los pasos que se hacían en cada parte de la sonata, tal como se la había enseñado su instructor de baile.

Se dirigía rumbo a su casa, hoy había sido un día agotador, el colegio lo tenía carcomido, puesto que estaban en semana de evaluaciones, además, de que el baile también le exigía, poniéndolo en un limbo en el que no sabía que ruta elegir.

Rebusco en su mochila para sacar algo de dinero,  luego de esto, paro a un taxi con su mano derecha, para proseguidamente montarse en el automóvil e indicarle la calle junto al barrio al que iría. Saco su cuaderno para mirar unos apuntes de química, ya que en la mañana tendría evaluación oral. Con el dedo índice señalaba para el las fórmulas y símbolos químicos, y a su vez las repetía para que se quedarán en su cabeza, casi no podía concentrarse debido a la alta contaminación auditiva, era hora pico, indicando que centenares de carros y motos con gente se dirigían a sus hogares con el fin de descansar.

Pero el sonido del claxon de todos los vehículos y hasta de su propio conductor lo estresaban.

El auto paro en un semáforo, ahí, en ese preciso momento, Damián tomó la decisión de estudiar en su vivienda, aunque era obvio que su plan era practicar el baile en su casa para su próxima presentación.

Levanto la mirada y observo por la ventana, se topo con una chica que parecía ser de su edad, ella yacía en casi la misma posición que el joven muchacho, expectante ante la ciudad por medio de el auto, los dos fijaron sus vistas en ambos, sosteniéndolas como por unos 4 segundos, hasta que el muchacho de ojos color miel la aparto, justo en ese momento le había llegado un pensamiento.

"¿Quién será mi pareja de baile?" Se pregunto el joven de tez nívea mientras el sol del atardecer traspasaba por la ventana y lo iluminaba suavemente.

Frunció su ceño sacudiendo su cabeza mientras devolvía su vista a aquella niña que había captado su atención anteriormente, pero cuando volvió a dar una ojeada no la encontro, aunque insistió nuevamente volteando su rostro a todas partes no la halló por ningun lugar.

Suspiro con desgano respondiendo un mensaje que su padre le había recién enviado y con esa baja emoción culmino hasta su hogar.

—¿Qué harás hoy? —Preguntó su amigo quitándose su chaqueta por el exuberante calor que hacía en la mañana en el colegio Edén.

—Probablemente vaya a la academia —Tomo una pausa para lavar sus parpados con el agua del lavamanos —, necesito aprenderme un baile para mi próxima presentación.

—¿Es en pareja?

—Sí, y lo peor es que no tengo una, aunque creo que el profesor me pondrá con alguna de la clase. —Le respondió a su amigo de elevados cabellos dedicándole una sonrisa sin ánimos.

—Ah, Damián, te noto decaído, si quieres puedo ser tu pareja de baile. —Bromeó con el muchacho sacándole una risa al contrario.

—Que dice —se rió secándose su cara con la camiseta que traía puesta.

El descanso no tardo en finalizar, así que ambos chicos se separaron para dirigirse a sus respectivos salones. El chico de hebras marrones presentó su previa y afortunadamente paso su evaluación de química que tanto lo tenía preocupado en la mañana. Luego pasó a matemática, en la que no le fue tan bien y concluyo con historia, en la que le fue fatal.