Por que eres tan lindo conmigo

Capítulo 14: "Casi al punto"

Al acabar el concierto, íbamos para mi casa, en el transcurso nos mojamos, mi suerte fue que Dylan tuvo la amabilidad de prestarme su sudadera, llegamos y como no paraba la lluvia nos quedamos hablando de lo grandioso que había sido esa experiencia, cuando nos percatamos de la hora ya era muy tarde para salir y que el regresara a su casa, así que insistí en que se quedara en la habitación de Azahel, pidió prestado el teléfono de la casa y pidió permiso a sus padres, después del regaño que le metieron por teléfono me dijo que se quedaría, así que fui por una de las pijamas de Matty, después cada quien se bañó y cambio por ropa menos mojada o mejor dicho seca, me acompaño y ayudo a colgar la ropa en el tendedero, cuando acabábamos, yo estaba temblando por el frío que hacía, así que me abrazo, después se separó ligeramente de mí, tomo con la mano derecha mi mejilla y con la otra mi pelo y me beso, primero fue lindo y cariñoso, después fue tomando intensidad, hasta que empezamos a sentir esa pasión correr por nosotros, seguimos y seguíamos, ya no tenía frío, sino más bien sentía como ardía todo mi cuerpo.

[ ¡Sepárate de el!, ¡tú y el ya no son nada!, ¡Diablos!, ¡Necesito esto!, ¡Como te extrañe!, ¿Qué hay de Alex?, ¿Alex qué?, ¡Si, Alex no te ama! ¿Y ese beso?, ¡Te lo dio por lastima, estabas triste!, ¿Qué hay de Camile? ¡Si ellos son novios! ]

Todos estos pensamientos iban importándome mas, pero la intensidad aumentaba, lo sentía, lo quería conmigo, esto ya era más fuerte que yo misma, ya no lo aguantaba más por lo que instintivamente subí mis piernas envolviendo con ellas sus caderas, el me sostuvo con uno de sus brazos y con el otro seguía tomando mi cabeza y a si profundizando mas el beso, empezó a caminar conmigo en esta postura hacia la puerta, pero ya no me besaba sino que lamia mi cuello, la abrió siguió adelante subió las escaleras sin dejar de hacer lo que hacía, cada lamida era un gemido mío, entro a mi cuarto, me quito de golpe mi pijama, después se quitó la suya, le susurraba que parara, pero mi cuerpo no hacia nada para detenerlo, seguía besándome.

[ ¡Esto esta mal!, Camile es una mala persona, pero ninguna mujer merece esto ]

Seguían tomando fuerza estos pensamientos, cada vez con mas y mas fuerza, pero yo seguía sintiendo el fuego correr por mis venas, esto era lo que mas quería, nunca deje de quererlo, siempre fue mi impotencia de no poder hacer nada para regresar con el, yo lo amaba y así sentía que seria hasta el final de los tiempos y mas ahora que lo sentía tan cerca de mi.

[ ¿Dejaras que sufra y pase todo lo que sufrió Nicki? ]

Esta fue la gota que derramo el vaso, cuando estaba empezando a besar mi cuello mientras tomaba uno de mis senos, tome la fuerza suficiente para arrojarlo al piso, me miro extrañado al momento en que se levantaba, lo único que pude pronunciar en ese momento fue:

-Sal de mi cuarto ahora

Cuando salio me levante de golpe a cerrar la puerta con seguro, me puse de nuevo la pijama y me arroje después a mi cama y sin darme cuenta ya estaba llorando de nuevo, recordando todo lo bello que pasamos juntos.