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Jimin se enamoró de la danza a los 5 años.

Sus padres trabajaban, al igual que sus abuelos.

Así que fue cuidado por su vecina desde pequeño. La mujer consiguiendo dinero extra por ello.

Hyuna era la maestra de ballet de la pequeña escuela local, así que muchas veces termino en el estudio de la chica.

Veía las clases, o la veía a ella practicar.

Hyuna era buena, muy buena.

Pero una lesión la limitó, haciendo que terminada enseñando en un pequeño pueblo.

Pero después de todo, Jimin le maravillaba verla, o a sus alumnos.

Le encantaba el piano que tocaba durante la práctica, las bellas zapatillas, los vestidos, el orden en el baile.

Como el ballet era magia.

Esos movimientos preciosos, pero llenos de fluidez, era como si esas personas fuera las hojas de otoño arrastradas por el viento.

Era precioso.

Y un día, solo le pidió a Hyuna que le enseñara.

Siendo un niño de 5 años, tuvo su primera lección, y jamás pudo dejarlo desde entonces.

Sentía que todo a su alrededor lograba tener sentido cuando bailaba.

Le gustaba como tenía total control de su cuerpo, pero parecía que todo se hacía sin esfuerzo.

Como en un escenario, podía perderse durante toda la presentación, vivir en ese mundo de fantasía que estuviera contando a travez de su baile por unas horas, hasta escuchar esos aplausos que le causaban un escalofrío pero también llenaban su pecho de orgullo.

"Tienes talento" le dijo Hyuna, a sus 15 años "Y no solo eso. Tienes pasión, estás enamorado del baile, y todos pueden verlo. Te entregas en cuerpo y alma en ese escenario... No lo desperdicies"

Jimin lo entiendo a sus 17 años, cuando sus padres insistían que trabajará en el despacho donde su madre era secretaria.

Cuando veía ahora era el más mayor en las clases de Hyuna.

Tenía que salir de ahí.

Antes de terminar como Hyuna.

Antes de que la monotonía le asfixiara y lo matara lentamente.

Estaba apostando todo al baile.

Y no planeaba arrepentirse ahora.

"La compañía les dará nuevas zapatillas cada que sea necesario

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"La compañía les dará nuevas zapatillas cada que sea necesario. Traten de cuidarlas" decía la señora Cha a los nuevos "Yo escojo los lugares, así que les aconsejo dar lo mejor de ustedes si no quieren terminar hasta atrás"

La mujer miraba a cada uno con severidad.

"No toleró retardos, ni quejas o faltas ¿Entendido?"

"Si señora" dijeron todos al unísono.

Music of the Night <Yoonmin>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora