Ops Embarazada

capitulo 18

- malas noticias, la niñera de Emir no va a poder venir hoy.

- y la niñera de nuestra hija tampoco podrá venir hoy.

- que?

- yo tengo una reunión ahora.

- y sabes que yo presento mi proyecto final.

- y que hacemos?

- podrán hacerte cargo tus padres?

- no, me los llevaré yo a la empresa.

- pero y tú reunión?

- ay veré como me las arreglo.

- estas seguro?

- si, vete tranquila.

- te lo agradezco, no más terminé salgo directamente para la empresa.

- claro te veo haya.

Nos damos un beso.

La veo irse.

Y mi opresión en el pecho se hace presente.

Y es que han pasado tantos meses, y no le he dicho que tengo una hija con otra mujer.

El dia de la fiesta, me sorprendí mucho cuando la vi.

Se me iba a salir el corazón.

Mi familia, sorprendida y desconcertada a la vez, mi tía y primo, sonreían sin razón, como que si les alegraba de la situación.

Mi abuela no se enteraba de nada, y es que nunca se enteró qué yo tenía una novia, que me dejó.

Asi que ella no se daba cuenta de la situación, porque estaba muy feliz por mis hijos.

Bueno, le tuve que decir a mis padres toda la verdad, ellos saben que tienen una nieta de 7 años.

Ya fueron a visitarla y hablan con ella, todos los días.

Yo no he podido decirle a Rydel.

Cada vez que reúno el valor sucede algo, y ellos me dicen qué no le diga, que arruinaria mi matrimonio.

Y es cierto, pero las mentiras que se ocultan durante tanto tiempo son las que duelen más.

Le hago la comida a mis hijos, y se las doy, con la bebé no batallo pero con su hermano si.

- hijos como le digo a su madre que tienen una hermana de 7 años? - les pregunto como que si fueran a darme la respuesta.

Termino de darles su papia.

Esta cosa que le dan a los bebes, es horrible, un dia la probé sin saber y es la peor cosa que he probado, oh bueno, talvez estoy exagerando.

Por suerte Rydel ya los dejó bañados y listos.

Los llevo conmigo a su habitación para preparar su pañalero.

Los colocó en su cuna.

- esten se quietos, no me demoró.

Voy agarró el bolso de cada uno, alistó sus cosas y vamos a nuestra habitación, ahora me toca alistarme a mí.

Los veo a casa rato para saber que es lo que hacen.

Por suerte no molestan mucho.

Me peino, me lavo los dientes, perfume, corbata, chaloco, reloj y listo.

- ya - no los veo - pero si estaban en la cama.

Escuchó sus risas desde afuera.

Voy a la terraza y si están allí.