Sour and Sweet || HyunLix

Capítulo 14

Viernes 12 de febrero.

—¡HyunJin Hyung, te dije que me esperaras!

—Te demoras demasiado en arreglarte para una salida, yo soy puntual en todo —reprochó Hwang cuando Félix llegó a su lado, fuera del edificio donde residían.

—Es que estaba buscando algo y no pasaron ni diez minutos cuando tú ya estabas fuera.

El Delta exhalo comenzando a caminar.

—¿Y qué es lo que tanto buscabas?

Félix a un par de pasos detrás de él viró los ojos con enfado.

«Buscaba exactamente la gabardina que traes puesta.»

—Nada importante, sólo mi cartera porque había olvidado en que abrigo la deje.

HyunJin negó con la cabeza metiendo las manos a su bolsillo, ligero el paso un poco cuando vio que Félix caminaba despacio y lo alentó a sentarse primero en la banca para esperar el autobus que los llevaría al parque central.

El silencio con Félix se volvió sofocante, siempre estaba hablando y hablando, pero ahora mismo sólo estaba ahí, mirando sus pies mientras jugaba con sus dedos.

—Para la próxima que me invites a salir... —HyunJin murmuró algo indeciso evitando mirarle cuando el pecoso volteo a verle—, asegúrate de no tardar tanto, si no te conociera ¿Qué crees que iba a pensar de que llegas tarde?

—Que soy un irresponsable ¿Tal vez? Bueno, aunque eso ya lo piensas —se pasó la mano por las ondas de cabello que caían en su frente—. Vivimos juntos, y te invite a salir, tú te arreglaste temprano cuando dije que sería a las cuatro y media, ¿No será que estuviste todo el día esperando esta salida? —le miró inquisitivo—. Llegar antes también es ser impuntual.

El Delta se estremeció completo no sabiendo que decir, porque tenía razón, había buscado miles de atuendos para ponerse porque nunca un amigo lo había invitado a dar un paseo a excepción de Félix.

—Hyung, era broma, tampoco pongas cara de espanto —el pecoso dijo, sonriendo y palmeando su hombro.

—Omega malo —gruño por lo bajo.

(...)

—¡Me encanta este bendito helado! ¡Vendré con Innie y Minho la próxima vez, les encantará! —exclamó Félix comenzando a caminar fuera de la heladería donde habían ido.

HyunJin sonrió, mirando como Félix daba pequeños saltos hacia arriba de emoción. Él, en cambio, iba de lo más normal con un agua natural en su mano derecha y una bolsa con bocadillos en la izquierda. Lamentaba no compartir la emoción andante del rubio.

—Oye.

Ambos se detuvieron, más sin embargo Hwang repuso el paso con rapidez.

—Hyung creo que te hablan a ti —informó Félix tomándole de la manga de su gabardina, el Delta se detuvo mirando a la mujer que supuestamente le hablaba.

—¿Hyung? ¿Eres mayor que yo entonces, oppa?

El azabache abrió los ojos con ligera sorpresa para después bufar haciendo una mueca de desagrado.

—No te ves tan joven como él —señaló al pecoso, alzándose de hombros y parpadeando para tratar de lucir inocente—. ¿Quería algo, señora?

Ella se veía más joven que él, de hecho, pero Hwang se sintió ofendido por haber sido llamado viejo.

—Hum, bueno —la chica se acercó a HyunJin sosteniendo su teléfono con las dos manos—. Te seguí por un rato y-