Batido de sangre

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Yo soy dueña de un pequeño lugar que vende comida y principalmente batidos naturales, los cuales son los que me generan más ganancias. Estos se hacen en una gigante batidora que hace alrededor de 200 batidos porque tenemos una gran demanda y es la única forma de abastecerla. Tengo 9 empleados, 3 meseros, 3 cocineros, 2 conserjes  y uno que se encarga de los batidos, solo había un problema, antes eran 10, pero ocurrió un accidente, un lamentable accidente.
Antes habían dos personas que se encargaban de los batidos, Paul y Lisa. Un par de adolescentes que querían ganarse un poco de dinero en verano. Ellos estaban trabajando como de costumbre, echando los ingredientes en la licuadora, ellos tenían la mala costumbre de reírse y vacilar mientras trabajaban, definitivamente una terrible idea.
Seguían corriendo alrededor de la licuadora y tengo que admitir que era un poco mi culpa el "accidente" porque siendo sincera nunca me agrado Paul, más porque salía con mi hija Natalie. Yo ya le había advertido que no corriera y él no me hizo caso, entonces me pareció buena idea pasar a la par de él y empujarlo "accidentalmente" y justo en ese momento Lisa encendió la licuadora sin darse cuenta de lo que acababa de ocurrir.
Oí un grito desesperado de Lisa, que estúpida pensé mientras me tapaba los oídos para que no se reventarán mis tímpanos.
-No te preocupes- le dije fingiendo un poco de nervios.
-Hay que decirle a la policía, ellos sabrán que hacer.
-No podemos hacer eso- exclame pensando en mí y que no clausurarán el lugar por el "accidente" y no el perder dinero de 200 batidos- lo mejor es servir los batidos para ocultar el cuerpo.
-¿Qué?- me pregunto alarmada- ¿es en serio?
-¿Quieres ir a la cárcel?
Ella se quedó callada y sirvió la mezcla con los restos de él, solo le reportaron como desaparecido y nunca sospecharon y sorprendentemente los clientes preguntaron que que les echamos a los batidos porque estaban de maravilla, estoy segura de que no les hubiera gustado saber ese ingrediente secreto.

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