Cartas Para Mikasa [Mikasa Y Tú] Terminada ✔️

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𝓶𝓲𝓴𝓪𝓼𝓪
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Querida mikasa

La otra vez me preguntaste sobre si tenía una pareja o no, siendo sincera, no sé porque no quería decir la verdad, pero tenías tanta curiosidad que finalmente lo dije.

La campana de la escuela interrumpió tu interrogatorio repentino, pero te voy a contar un poco más de Marco.

Él y yo nos conocimos en secundaria, siempre estábamos juntos, con otro chico llamado Jean, éramos el trío perfecto. Hasta que Jean se fue, ahora solo se que está en una tipo de preparatoria militar.
Marco y yo seguimos siendo amigos, hasta que no se cuándo comenzó, que de repente me di cuenta de que ya llevaba tiempo sintiendo algo más que amistad por Marco, pero no sabría decirte cuando comenzaron a brotar esos sentimientos.
Al principio fue como miel sobre hojuelas, pero con los meses se fue deteriorando la relación, y la verdad no sé cómo ni cuando, pero hasta ahora no sé cómo describiría nuestras relación entre él y yo. Antes cuando estaba Jean, era como una especie de balance, debo admitir que Jean también me gustaba, al igual que a Marco, Jean era muy atractivo, bueno supongo que lo sigue siendo. Pero ese es otro tema.
En fin, los tres éramos como un triángulo, ni más ni menos, iguales, equilibrados. No se que nos pasó, aún extraño estar con ellos.
Mikasa, cuando estoy contigo me siento, tranquila, como si todo estubiera en orden y nada faltará, así como me sentía con Jean y Marco hace algunos ayeres. No se si comprendas lo que estoy tratando de decir, pero sí.

Siempre tuya, _______.

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Ya habían pasado dos meses exantos desde el primer día que nos conocimos, con el clima de octubre, y los exámenes y proyectos del primer parcial ya habían acabado. Solo quedaba relajarse y esperar los festivales escolares de octubre, las mini vacaciones de aquel mes y una que otra fiesta en casa de alguien.

En estos dos meses no solo había conectado más con Mikasa, sino qué tambiem hice nuevas amistades. Ahora ya no éramos solo ella y yo, también teníamos a Armin, un chico rubio de complexión delgada, con unos lentes y un cabello largo que hacía que a veces lo confundieran con una chica. Bueno, Armin era lindo, inteligente, pero no muy fuerte.

- Tranquilo Armin - consolaba a mi amigo rubio mientras lo empezaba a rodear con mis brazos en forma de un abrazo.

- Ahhhh~ - chillo apartándose de mi

- ¿Qué sucede? - pregunte algo espantada - ¿No te gusta el contacto físico? Lo siento, yo no quería...

- No, no es eso - me interrumpió, se podía escuchar algo apenado - Es solo que... Nada olvidado - se puso rojo, como un tomate, no, como las manzanas rojas que Mikasa y yo acostumbramos a comer en los recesos.

- ¿Qué le pasa a Armin? - pregunto Mikasa dejando su mochila en su banca.

- No lo sé, está rojo - toque su frente, se sentía algo caliente - Armin, no debes de estresante tanto, ahora al parecer tienes fiebre, tendremos que ir a la enfermería - mencioné algo irritada

- Nooo, no, no es para tanto. Ya sientense ya casi llega el profesor.

- Ahhh Historia, mi materia favorita - solté un chillido de emoción.